Resumen: El auge de Internet y las redes sociales ha marcado el comienzo de una nueva forma de violencia en el noviazgo denominada ciberviolencia. Esta forma de abuso abarca actos de control, humillación y amenazas en el ámbito online.
Un estudio reciente revela que creencias como los mitos del amor romántico, los celos y, en particular, el sexismo desempeñan un papel fundamental en la propagación de la ciberviolencia. Desechar estas creencias es vital para promover relaciones en línea más saludables.
Hechos clave :
- La ciberviolencia, una forma digital de abuso en las citas, incluye actos como compartir fotografías no autorizadas y acoso cibernético.
- Muchos jóvenes a menudo malinterpretan el control y la agresión en las relaciones como indicadores de amor genuino.
- Se ha identificado que los mitos románticos, los celos y, en particular, el sexismo, contribuyen de manera importante a la ciberviolencia.
Fuente: Noticias de neurociencia
Con el auge generalizado de Internet y las plataformas de redes sociales, las relaciones románticas están encontrando cada vez más su camino hacia el ámbito digital. Si bien esto ofrece numerosos beneficios, también presenta un lado más oscuro: un aumento de una forma específica de violencia en el noviazgo denominada ciberviolencia .
La ciberviolencia engloba actos de control, humillación, intimidación y amenazas dirigidas a una pareja o expareja en el ámbito online. Pero ¿qué alimenta esta forma de abuso?
Un estudio reciente tuvo como objetivo desentrañar los vínculos entre creencias como los mitos del amor romántico, los celos y el sexismo y la aparición de la ciberviolencia.
La violencia en el noviazgo, entendida tradicionalmente como cualquier forma de agresión (física, psicológica o sexual) hacia una pareja o expareja, ha sido reconocida desde hace tiempo como un problema de salud pública preocupante. Sus repercusiones, especialmente en las personas más jóvenes, van desde traumas psicológicos graves hasta daños físicos.
Lo alarmante es que esta forma de violencia ha evolucionado con la popularización de Internet. Actos como el intercambio no autorizado de fotografías íntimas, el ciberacoso y el acoso en línea caen bajo el amplio espectro de la ciberviolencia. Estos comportamientos tienen graves implicaciones para el bienestar mental y emocional de los jóvenes, y reconocerlos es fundamental.
Uno podría preguntarse por qué los jóvenes, especialmente, son vulnerables. Una realidad alarmante es que muchos jóvenes a menudo malinterpretan los actos de control y agresión como indicadores de un amor romántico genuino. Para ellos, el conflicto, aunque tóxico, puede parecer una faceta integral de una relación romántica. Agregue a esto los celos inherentes que a menudo surgen en las relaciones, especialmente cuando surgen amenazas percibidas, reales o imaginarias.
En la era digital, estas amenazas pueden manifestarse como un comentario inocuo en la publicación de un socio o una foto que le gusta a un individuo desconocido.
Pero ¿de dónde surgen estas creencias? Las construcciones culturales y las normas sociales desempeñan un papel complejo.
Los mitos románticos, por ejemplo, perpetúan la idea de que el amor verdadero es posesivo y exclusivo. Estas creencias sugieren que una relación romántica ideal es intensa, absorbente y, a veces, irracional. Si bien estas nociones pueden parecer apasionadas y profundas, fomentan un entorno propicio al abuso.
Sin embargo, el estudio encontró que, si bien los mitos románticos tenían un papel protector mínimo contra la victimización, los celos y las creencias sexistas desempeñaban un papel más directo en la propagación de la ciberviolencia.
El sexismo, otro actor importante en este paradigma, se refiere a creencias que restringen y limitan la expresión de género, lo que con frecuencia conduce a la discriminación contra las mujeres. Las creencias sexistas perpetúan las dinámicas de poder y los estereotipos de género en las relaciones, lo que a menudo conduce a actos de violencia.
En el ámbito de la ciberviolencia, estas actitudes pueden expresarse como troleo misógino o acoso en línea dirigido principalmente a las mujeres. Por ejemplo, los hombres e incluso algunas mujeres que tienen opiniones más tradicionales y sexistas pueden tener más probabilidades de aceptar, o incluso perpetrar, actos de agresión en línea.
Si bien es innovador en su exploración de los roles entrelazados de los celos, el sexismo y los mitos románticos en la ciberviolencia, el estudio no está exento de limitaciones. Depender principalmente de datos autoinformados plantea el riesgo de un sesgo de deseabilidad social. La sobrerrepresentación de mujeres en el estudio también podría sesgar los hallazgos.
En conclusión, comprender las causas de la ciberviolencia es esencial en esta era digital. Al analizar el papel de los celos, los mitos románticos y el sexismo, podemos equipar mejor a los jóvenes con las herramientas para fomentar relaciones más saludables, tanto en línea como fuera de línea.