«Los métodos poco científicos para tratar de lograr la «inmunidad de rebaño» son inhumanos»
Para dos de los más destacados epidemiólogos de Estados Unidos y China, la cooperación mundial en el combate contra el COVID19 es una condición «sine qua non» para acabar con el virus. Advierten, por otra parte, que un regreso indebidamente rápido a la «vida normal», puede conducir a la catástrofe.
REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL
Según informó la Agencia china Xinhua este lunes, dos destacadas personalidades científicas de Estados Unidos y China, el experto en enfermedades respiratorias Zhong Nanshan y el conocido especialista estadounidense en enfermedades infecciosas, Anthony Fauci, realizaron un llamamiento conjunto a la solidaridad y cooperación mundiales para poder hacer un frente eficaz en contra de la pandemia del coronavirus
Ambos expertos estimaron que la cooperación mundial es esencial en el control epidémico.
El nuevo coronavirus es enemigo de toda la humanidad, dijo Zhong, que es un investigador de la Academia de Ingeniería de China y un destacado experto en la investigación de enfermedades respiratorias en China.
«Si como sucede, el coronavirus todavía sigue propagándose en algunos países individuales, no puede decirse que la COVID-19 esté sometida control en todo el mundo. Si deseamos acabar con esta epidemia, necesitamos que los responsables políticos en la toma de decisiones de cada país tomen decisiones apropiadas basadas en la ciencia y en la evidencia. Todos deben dar lo mejor de sí mismos. Así que necesitamos la solidaridad mundial».
Zhong estimó que algunos métodos poco científicos e inhumanos que pretenden lograr una «inmunidad natural» no deben utilizarse para lograr «la inmunidad de rebaño». Fueron dos destacados líderes políticos occidentales, el norteamericano Donald Trump y el británico Boris Johnson los que abiertamente, a principios de la pandemia, propugnaron que se combatiera al virus a través de la denominada inmunidad de rebaño, consistente en permitir que una parte importante de la población se contagie, provocando de esa manera la inmunización del resto.
«Con el desarrollo y la comercialización de las vacunas se requerirán al menos dos a tres años para lograr una auténtica pero también humana, inmunidad de rebaño en todo el mundo», precisó el científico chino Zhong.
Los dos expertos coincidieron en que equilibrar el desarrollo económico y la prevención y control de la epidemia es un desafío mundial y en que un regreso indebidamente rápido a la «vida normal» podría conducir a una catástrofe.
Por su parte, el norteamericano Fauci precisó que
«en el pasado tuvimos éxito en la cooperación mundial contra la viruela, la polio y el sarampión. No hay ninguna razón en el mundo por la que no podamos hacer lo mismo con la COVID-19 mediante una combinación de medidas de salud pública cooperativas y la aplicación de la ciencia para tener intervenciones en la forma de vacunas, terapias y otro tipo de intervenciones».
Fauci agregó que era perfectamente consciente de que
«no vamos a lograr vacunar al mundo en un año, pero espero que podamos suprimir la dinámica de este brote hasta el punto en el que aunque no haya sido eliminado, sí esté extraordinariamente bien controlado de modo que pueda haber algunos pasos hacia la normalidad».