Las interacciones integrales y los autorrefuerzos en el proceso de catástrofe ambiental global han profundizado la crisis sanitaria mundial.
Por ejemplo, las enfermedades cardiovasculares y respiratorias, los cánceres causados por partículas, óxidos de nitrógeno, ozono y otras toxinas ambientales están aumentando, exacerbados por el estrés laboral, el trabajo por turnos y las condiciones de vida precarias. Las hambrunas como resultado de sequías e inundaciones debilitan el sistema inmunológico, al igual que las enfermedades mentales y el trastorno de estrés postraumático debido a los desastres experimentados.
El peligro de nuevas pandemias
La mayoría de las enfermedades infecciosas que asolan a la humanidad son zoonosis, es decir, se transmiten de los vertebrados a los humanos. «El Consejo Mundial de la Diversidad… señaló que existen vínculos entre las pandemias y la deforestación, el uso extensivo de la tierra y el comercio de vida silvestre. Los contactos cada vez más estrechos entre los animales salvajes y la ganadería también influyeron. Cada año, se observa que cinco nuevas enfermedades se propagan a los humanos, y cada una de ellas podría convertirse en una pandemia». [1] El virus de la viruela símica se ha estado propagando en África durante varios meses. Según el Ministerio de Salud de la República Democrática del Congo, entre el 1 de enero y el 14 de septiembre de 2024 se notificaron 25.757 casos sospechosos de viruela símica en casi todas las 26 provincias de la RDC, incluidas 806 muertes. Los expertos temen que también pueda haber un brote en la capital, la metrópolis de Kinshasa, de 16 millones de habitantes. Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda también se ven afectados. La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró una emergencia sanitaria de importancia internacional a mediados de agosto.
Fluten, die das Wasser verseuchen
Bei extremen Überschwemmungen werden Trinkwasserbrunnen überflutet, der Dreck der Städte in Flüsse gespült und das Grundwasser verunreinigt. Wegen verkeimtem Wasser musste dieses Jahr schon in Orten Sachsens, Bayerns und Baden-Württembergs die Trinkwasserversorgung abgestellt werden. Insbesondere südlich der Sahara ist Cholera ein ständiges Gesundheitsproblem wegen verseuchtem Trinkwasser und den katastrophalen Hygienebedingungen. An akutem Durchfall sterben weltweit jedes Jahr rund 1,5 Millionen Menschen, vor allem Kinder. Durch häufigere Überschwemmungen, höhere Temperaturen sowie knapper werdende Trinkwasser-Ressourcen haben Cholera und akut wässrige Diarrhö (Durchfall) leichtes Spiel. In Pakistan hatten nach der Flutkatastrophe 2022 Millionen Menschen sechs Monate später immer noch keinen Zugang zu Wasser.
Die Klimakatastrophe als Treiber der ungezügelten Ausbreitung von Malaria
Die Erderwärmung beschleunigt die Verbreitung von Malaria. Die Erreger und die Larven der Anopheles Mücke als Überträger entwickeln sich schneller und sie erobern neue Regionen. Jedes Jahr sterben daran eine Million Menschen. In Pakistan fanden die Mücken nach der Flutkatastrophe neue Brutstätten und fünfmal so viele Menschen wie in den Jahren zuvor infizierten sich. Malaria-Medikamente fehlen häufig. Die Pharmakonzerne zeigen solchen Armutserkrankungen die kalte Schulter, da keine größeren Profite locken.
„Tropenkrankheiten“ als Alltag in Europa?
Höhere Temperaturen und veränderte Niederschläge sind für Überträger wie Fliegen, Mücken oder Schnecken in der Regel vorteilhaft. Die bisher nur in tropischen Regionen verbreitete Asiatische Tigermücke wurde mittlerweile in Süddeutschland, Frankreich sowie Italien nachgewiesen. Sie kann 26 gefährliche Virenarten verbreiten. „Dengue steht bei uns praktisch vor der Tür“, warnt Prof. Dr. Jürgen May, Leiter des Hamburger Bernhard-Nocht-Instituts für Tropenmedizin.[2] Dengue-Fieber verläuft meist mit grippeähnlichen Symptomen, Kinder und Jugendliche erkranken oft schwer. Zikavirus kann bei Infektion von Schwangeren zu Fehlbildungen führen. Derzeit ist die Chance in Deutschland noch gering, daran zu erkranken. Sandfliegen, die Leishmanien (Parasiten) übertragen, verbreiten sich aus dem Mittelmeerraum nach Norden und in immer mehr US-Bundesstaaten.
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¡Aprende de la pandemia del coronavirus!
A pesar de los grandes avances en medicina y la experiencia relevante sobre cómo combatir las pandemias, la gestión de crisis ha sido un desastre en la mayoría de los países, especialmente en países con gobiernos fascistas, como Trump/EE.UU. y Bolsonaro/Brasil, o en países con sistemas de salud miserables. Los negacionistas del coronavirus y los escépticos de todas las tendencias difundieron desinformación y crearon confusión. Las asociaciones capitalistas bloquearon medidas sensatas. La lucha contra las pandemias está indisolublemente ligada a las luchas internacionales contra la catástrofe ambiental global y contra las relaciones capitalistas que destruyen la unidad del hombre y la naturaleza. Es parte de las luchas contra la comercialización y el desmantelamiento de los sistemas de salud pública y el sometimiento de la investigación y la atención en salud a la lógica de lucro de las empresas farmacéuticas. Cada vez es más urgente una lucha que cambie la sociedad y una unión firme de los movimientos obreros y ecologistas.
- ¡Prohibición del uso de plantas y animales genéticamente modificados!
- ¡Reconocimiento, prevención y tratamiento de enfermedades ambientales!
