Controversia en Ucrania: Homenajes a Stepan Bandera dividen al país»
En el aniversario del nacimiento de Stepan Bandera, grupos ultranacionalistas nazis ucranianos celebraron su legado, mientras que su participación en el holocausto judío junto al Ejército invasor nazi, continúa sin terminar de ser develada en los medios de comunicación occidentales. ¿Héroe nacional o figura de la persecución étnica en Ucrania? La controversia alrededor de Bandera no cesa.
POR VICTORIA MARTÍNEZ, DESDE MÉXICO, PARA CANARIAS SEMANAL
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El pasado 1 de enero del nuevo año, en la ciudad de Leópolis, Ucrania, se celebró el 116.º aniversario del nacimiento de Stepan Bandera, un líder que en el curso de la II Guerra Mundial prestó su entera colaboración a los ejércitos nazis que invadieron su país, la Unión Soviética.
La ceremonia fue organizada por grupos ultranacionalistas ucranianos, incluyendo en ella una marcha con antorchas, discursos y consignas en apoyo al legado ideológico de Bandera. Estos actos, sin embargo, no han pasado desapercibidos, pues han fueron promovidos y organizados por sectores vinculados a movimientos neo-nazis y de la extrema derecha ucraniana, hecho que ha provocado críticas tanto en Ucrania como en la comunidad internacional.
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Este evento está enmarcado en un contexto político complejo, donde el nacionalismo ucraniano ha tomado fuerza en medio del conflicto con Rusia. No obstante, la reivindicación de Bandera despierta tensiones debido a su controvertido historial político, especialmente su colaboración con los invasores nazis durante la Segunda Guerra Mundial y su total implicación en crímenes cometidos contra diferentes comunidades étnicas, particularmente la judía.
¿Quién fue Stepan Bandera?
Stepan Bandera nació el 1 de enero de 1909 en Staryi Uhryniv, en lo que entonces formaba parte del Imperio Austrohúngaro (actual Ucrania). Creció en una familia profundamente ultranacionalista y religiosa, involucrándose desde joven en la Organización de Nacionalistas Ucranianos (OUN), una agrupación que abogaba por la independencia de Ucrania frente al dominio polaco y soviético.
En la década de 1930, Bandera ascendió como uno de los líderes más radicales de la OUN. En 1934, fue arrestado por su participación en el asesinato de Bronisław Pieracki, un alto funcionario polaco, y condenado a cadena perpetua. Sin embargo, fue liberado por los nazis tras la invasión alemana de Polonia en 1939.
Durante la II Guerra Mundial, Bandera lideró una facción de la OUN conocida como OUN-B, que buscaba crear un estado ucraniano independiente. En 1941, declaró la independencia de Ucrania en Leópolis, con el apoyo inicial de la Alemania nazi.
Sin embargo, cuando por intereses estratégicos los nazis terminaron rechazando esta proclamación, Bandera fue arrestado y enviado a un campo de concentración, aunque disfrutando en él de un status especial. A pesar de esto, sin embargo, elementos bajo su liderazgo continuaron colaborando con los nazis y participaron en acciones de limpieza étnica, incluidos pogromos contra judíos, polacos y rusos en territorios controlados por la OUN.
Tras la guerra, Bandera vivió en el exilio en Alemania Occidental, donde continuó liderando actividades nacionalistas contra la Unión Soviética. En el año 1959, fue asesinado en Múnich. Su legado, sin embargo, quedó profundamente arraigado en determinados sectores de la sociedad ucraniana, que pese a su participación en el holocausto judío lo continúan viendo como un héroe que luchó por la independencia de Ucrania.
La controversia del legado de Bandera
El culto a la figura de Bandera se ha intensificado en Ucrania desde que los burócratas que lo gobernaban, pese a los resultados en contra de un referendo, decidieron en 1991 que se escindiera de la Unión Soviética.
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Uno de los monumentos levantados a Bandera en Ucrania
Tras la revuelta de Maidán en 2014, el culto a la siniestra figura histórica de Bandera ha crecido exponencialmente. Mientras que para algunos ucranianos, Bandera representa la lucha por la soberanía nacional frente a poderes foráneos, para otros, Bandera simboliza los crímenes cometidos bajo su liderazgo en la Ucrania ocupada por los nazis.
La rehabilitación oficial de Bandera en Ucrania ha sido fuente de tensiones con países vecinos como Polonia e Israel, que consideran inaceptable glorificar a una figura vinculada al genocidio y la limpieza étnica. A nivel interno, también divide a la sociedad ucraniana, particularmente entre el oeste del país, donde su figura es más venerada, y el este, donde predomina una visión duramente crítica .
El contexto actual: Nacionalismo y guerra
Los recientes homenajes a Bandera deben entenderse, pues, dentro del contexto de la guerra en Ucrania, donde el nacionalismo ha cobrado un nuevo impulso. En ese contexto, sectores de la sociedad ucraniana han recurrido a figuras históricas como Bandera para reforzar una identidad nacional que se opone a Rusia.
Sin embargo, la relación existente entre grupos nacionalistas y el gobierno ucraniano no deja de generar preocupación. Organizaciones internacionales y defensores de los derechos humanos han advertido reiteradamente sobre el peligro de permitir a elementos adscritos al nazismo puedan disponer de influencia notoria en el discurso público.
Al mismo tiempo, la instrumentalización de figuras como Bandera plantea preguntas incómodas a los aliados occidentales de Ucrania sobre la construcción de una narrativa nacional que está basada en una historia llena de sangre y masacres étnicas.
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