El Lince
Un dicho popular en muchas partes del mundo (y he recorrido 31 países) dice que solo hay alguien más estúpido que un occidental: otro occidental. Obvio, aunque se puede hacer una apreciación aún más exacta dentro de lo que se ha dado en llamar el Occidente colectivo: solo hay alguien más estúpido que un estadounidense, otro estadounidense.
Desde que China decidió responder al matón de barrio Trump con los aranceles (ver aquí y aquí) lo que se está diciendo en EEUU es de lo más estúpido aunque tienen que hacerlo para que no se les caiga el chiringuito. Así, se ven cosas como lo siguiente: «El problema para los fabricantes chinos no son solo los aranceles, sino la incertidumbre sobre el calendario y los cambios repentinos en las políticas. Afirman que nadie está dispuesto a realizar grandes cambios en la producción o los envíos hasta que el panorama comercial se vuelva más predecible. Esto significa que la mayoría de las fábricas chinas están paralizadas. (…) Lo que parece una decisión improvisada o una capitulación repentina por parte de Trump puede ser muy eficaz para desestabilizar a gobiernos y corporaciones extranjeras. (…) La interdependencia de la globalización ha dejado a muchas naciones sin capacidad para sortear una disputa comercial, y la supervivencia de China se basa casi por completo en exportaciones constantes a Occidente, y en particular a Estados Unidos. (…) No dejes que los influencers de TikTok y YouTube, con sus altos salarios, te engañen con videos de rascacielos chinos repletos de luces LED o fiestas de lujo con robots bailarines. Esta no es la verdadera China. Bajo la fachada se esconde una nación al borde del desastre».
Ni que decir tiene que esto es algo que también se reproduce en Europa, aunque no en esta escala. Pero el ombligo occidental es de tal calibre que toda estupidez es poca. Durante años nos hemos desayunado con que Rusia robaba lavadoras para quitar los chips porque es un país atrasado, que se quedaba sin tanques y demás. Ahora es el turno de China. Porque no es Occidente quien está en serios problemas, sino sus enemigos. Rusia se iba a hundir con las «sanciones del infierno» y China está «al borde del desastre» por los aranceles. Ni más ni menos.
Por una vez, voy a hacer de «influencer» (palabra estúpida donde las haya) sin tener ni tiktok ni youtube ni x ni y ni z y voy a colgar algo de lo que está haciendo esa nación en serios problemas, al borde del desastre.
1.- China ha sobrepasado tanto a EEUU como a Rusia en la carrera espacial. Es el único país que tiene una nave en la cara oculta de la luna desde hace cinco años y sigue transmitiendo datos y elementos del subsuelo lunar desde entonces. Ahora tiene otra en Marte que hace lo mismo desde hace un año. Pero siendo importante, lo es más aún que tiene un palacio celestial (Tiangong) del que nadie habla. Menos mal que aquí estoy yo en mi faceta de «influencer» con un alto salario pagado, claro está, por el Partido Comunista de China.
Esta nave es la tercera de su saga, pero revela la ambiciosa agenda de China y lo que va a representar para el mundo. Digo esto porque ha sido diseñada para que se puedan realizar trabajos independientes o colaborativos. Por lo que sé, Rusia ya ha demostrado interés en ello. Mal asunto para un Occidente que no está en serios problemas, sino que, por el contrario, son los enemigos (China y Rusia en este caso) quienes los tienen.
2.- El mito de la superioridad militar de EEUU se derrumba aún más, por si no se hubiese derrumbado ya en el país 404, antes conocido como Ucrania. La prueba china de la bomba de hidrógeno no nuclear no solo es un indicativo de que a Taiwán le queda medio minuto cuando se utilice, sino que muestra cómo el armamento de EEUU (y occidental) están en la edad de piedra y no solo respecto a Rusia. Por lo que he visto, es una mejora muy mejorada de un arma rusa que se utiliza para evitar que los enemigos salgan de un edificio y que quienes lo hagan están tan graves que no pueden seguir luchando. La mejora china es que no hay supervivientes. En los dos casos los edificios quedan casi intactos.
3.- Mientras el mundo aún está discutiendo si la tecnología 5G es buena o mala, y si hay que bloquear a China por ello por cuestiones de «seguridad nacional», en China ya están en la 10G, lo que permite una conexión efectiva de tres milisegundos.
4.- China ha puesto a funcionar un reactor nuclear no contaminante que usa sodio en lugar de uranio.
5.- Supongo que estáis al día en deportes y en la media maratón del domingo en Beijing en la que participaron robots. Supera eso, Occidente.
Es evidente que China está en serios problemas y todo esto no es más que una vulgar campaña de propaganda que oculta el desastre que se avecina y que, además, es inminente gracias a los aranceles y a la firme actitud de Occidente contra los malvados comunistas.
Aunque…

Yo que vosotros intentaría rescatar al burro dado que vais a tener problemas con los coches (salvo que compréis los chinos). China no tiene prisa, ni mucho menos miedo y ataca donde más duele por mucho que los ignorantes estadounidenses y europeos digan que está al borde del desastre. Es evidente que se lo creen, pero mientras tanto al ampliar las restricciones a la exportación de tierras raras impide la fabricación de coches eléctricos, turbinas eólicas y aviones de combate entre otras muchas cosas. No está nada mal para estar al borde del desastre.
No solo eso. China ya no compra ni soja ni maíz a EEUU; ahora llegan desde Brasil y Australia, principalmente.
Lo anterior no es más que la constatación de cómo no hace mucho tiempo gran parte del gasto presupuestario chino se utilizaba para inversión y desarrollo. Hoy está gastando más para mejorar las condiciones de vida de la gente, utilizando recursos que no están vinculados a industrias clave, y lo hace para resolver fundamentalmente problemas en cuatro áreas clave: vivienda, atención médica, educación y pensiones. Eso se diseñó en el XIV Plan Quinquenal de octubre de 2020 y va a desarrollarse en el XV Plan Quinquenal de este año.
Mientras tanto, un poco de humor y sátira (antes del desastre chino).
Como buen «influencer» pagado por el Partido Comunista de China he decidido compartir con vosotros parte de mis emolumentos y acabo de recibir este por adelantado (a cambio de escribir todo lo anterior, por supuesto). Lo acabo de estrenar ahora mismo con un café.

El Lince
Publicado por Lynx Pardinus