EVA GOLINGER: TRUMP AUGURA UN POTENCIAL FRAUDE ELECTORAL EN NOVIEMBRE

REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL

    Según cuenta en un reciente artículo suyo la comentarista política estadounidense Eva Golinger, en el curso de los últimos meses, el presidente Donald Trump parece haber estado preparando un escenario propicio que le permita declarar «fraudulentos» los próximos comicios de noviembre, en caso de que  pierda su reelección, como están indicando con más fuerza  las encuestas cada día.

     En opinión de Golinger, el mandatario ha reiterado hasta la saciedad en  las redes sociales y en discursos públicos, que pudiera haber trampas en el proceso próximo electoral, si la mayoría de los votos se realizan por la vía del correo. Hasta el propio Fiscal General del Gobierno de Trump, William Barr, ha repetido  la misma cantinela, alegando sin  ningún fundamento que

  «un gobierno extranjero podría intervenir en el proceso comicial de noviembre» a través del sistema del correo, enviando miles de balotajes falsos».

   ¿Quiénes podrían ser los potenciales manipuladores de las próximas elecciones estadounidenses? Evidentemente, los rusos y chinos, que en una operación sofisticadamente conspiranóica, podrían hacer sucumbir  el inmenso poder con el que cuentan los grandes medios de comunicación norteamericanos. Sucede, además, que de acuerdo con lo que mantienen algunos medios norteamericanos, a rusos  y chinos les toca jugar, según la ocasión, papeles contradictorios: unas veces a favor de Trump y otras en contra.

    Golinger aseguró que voto por correo en Estados Unidos está permitido,  tanto en todos los Estados como en procesos electorales,  para aquellos votantes que no puedan asistir en persona a las urnas el día de las elecciones, bien  porque no no se encuentren en su ciudad o porque están enfermos.

   Ahora, con la pandemia del coronavirus, muchos gobiernos estatales —republicanos y demócratas—  han abierto  la posibilidad de votar por correo a todos los electores, para evitar el riesgo de infección en los centros electorales. En ello, el presidente Trump ha detectado una peligrosa maniobra.

   Trump ha aprovechado esta nueva circunstancia para hacer circular rumores falsos sobre un potencial fraude electoral, con la presunta intención de desacreditar  los resultados si estos no le son favorables.

    De tal tipo de operación, escribe Eva Golinger  se carece de precedentes  en ningún candidato presidencial a lo largo de la historia de los Estados Unidos.