
Uno de los delitos más lucrativos del mundo
Considerada como la esclavitud del siglo XXI, la trata de personas es uno de los delitos más lucrativos del mundo, después del tráfico de drogas y armas. En Canarias, las cifras relativas a este delito se han disparado de forma alarmante (…).
Por EUGENIO FERNÁNDEZ / REDACCIÓN CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
Considerada como la esclavitud del siglo XXI, la trata de personas es uno de los delitos más lucrativos del mundo, después del tráfico de drogas y armas.
El número de personas perjudicadas por la trata en el mundo se calcula en 2,5 millones identificadas, pero detrás de cada una de esas personas se estima que existen 20 más a las que no se les pueden poner nombre. El 80% de ellas sometidas a explotación sexual y el 18% con fines de explotación laboral, trabajo o servicios forzados
La Organización Internacional del Trabajo cifra en 4,5 millones de personas el número de víctimas de explotación sexual en el mundo. El 90% son mujeres y niñas. Sólo en el Estado español se calcula que hay alrededor de 45.000 mujeres prostituidas, 14.000 de ellas en riesgo de ser víctimas de trata.
En Canarias, las cifras relativas a este delito se han disparado de forma alarmante. La trata de mujeres con fines de explotación sexual en las islas ha aumentado un 30% desde el año pasado, según datos de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (APRAMP).
Según la presidenta de la organización Médicos del Mundo en Canarias, Elena Lugli, abordar esta situación requiere, entre otras medidas, que se efectúen cambios normativos que protejan a las víctimas.
“La trata con fines de explotación sexual es una realidad estrechamente ligada al fenómeno de la prostitución”, explica Lugli. La presidenta de Médicos del Mundo considera que el sistema económico capitalista y el racismo «favorecen la trata» de mujeres de los países empobrecidos.
Las cifras apuntan también a “muchas menores” en esta situación en el Archipiélago, aunque se desconozca su número exacto, por la falta de estudios oficiales al respecto.
MARCADAS DE POR VIDA
La mayoría de las víctimas de trata arrastran secuelas físicas y psicológicas a lo largo de toda su vida.
Son frecuentes las enfermedades de transmisión sexual y las secuelas de la violencia física como golpes, agresiones sexuales.
Psicológicamente, según datos de Médicos del Mundo, más del 68% sufre trastornos de estrés postraumático, que las hace padecer disociación, depresión, indefensión aprendida, pérdida de la autoestima y normalización de la violencia sufrida.
El protocolo para tratar a estas personas -explica la presidenta de la organización- establece 90 días de reflexión en los que la víctima está protegida hasta que decida denunciar, pero muchas veces no quieren hacerlo por angustia o miedo. En ese caso, se les retira la protección del Estado, aunque continúan con la de las entidades sociales “que trabajan en un marco estatal muy poco facilitador».
En Canarias, Médicos del Mundo ha denunciado en varias ocasiones las condiciones de vida en la que viven las personas reclusas en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIEs), ya que “representan una violación sistemática de los derechos humanos y del derecho a la salud”.
En el caso de las mujeres víctimas de trata con fines de explotación sexual que acaban en estos centros, ven agravados sus problemas físicos y emocionales por la vulneración de derechos que sufren por parte del país que los acoge y por parte de sus tratantes.