JAVIER TOURÓN.
El mundo de las altas capacidades está lleno de ideas preconcebidas y malentendidos. Muchas veces, estas creencias afectan la manera en que los padres, educadores y la sociedad en general entienden y apoyan a los niños con altas capacidades. Navegando hacia el talento ofrece una perspectiva clara y fundamentada, desmontando algunos de los mitos más comunes sobre estos niños. A continuación, señalo unos pocos mitos y cómo en el libro se desmienten.
Mito 1: “Los niños con altas capacidades tienen buen rendimiento en todo”
Uno de los mitos más extendidos es que un niño con altas capacidades destacará en todas las áreas académicas. En realidad, muchos niños con altas capacidades tienen intereses y habilidades específicas, lo que significa que pueden sobresalir en un área y tener un rendimiento promedio o incluso bajo en otras. Navegando hacia el talento explica que no todos los talentos son académicos y que un niño puede mostrar alta capacidad en arte, ciencias o música, y tener dificultades en otros campos.
Mito 2: “Los niños con altas capacidades no necesitan ayuda, se las arreglan solos”
Es común creer que, por su capacidad, estos niños pueden avanzar sin apoyo adicional. Sin embargo, Navegando hacia el talento señala que estos niños también enfrentan desafíos emocionales y sociales, en ocasiones muy serios. Sin un entorno que entienda sus necesidades específicas, pueden sentir frustración o aburrimiento en el aula, sentirse ‘raros’ o inadaptados. El libro ofrece ejemplos que muestran cómo el acompañamiento adecuado marca la diferencia en su desarrollo emocional y académico.
Mito 3: “Son niños problemáticos o inadaptados”
Existe la creencia de que los niños con altas capacidades tienden a ser problemáticos o a tener dificultades para integrarse. Aunque algunos niños muestran sensibilidad o comportamientos intensos, esto no es una regla general. En Navegando hacia el talento, se explica que el comportamiento de estos niños puede estar relacionado con su necesidad de estímulo o su inconformidad con un entorno que no les desafía. Lejos de ser “problemáticos,” su comportamiento suele reflejar un mal ajuste entre sus necesidades y el entorno educativo.
Mito 4: “Las altas capacidades se notan a simple vista”
Muchos piensan que las personas con altas capacidades son fáciles de detectar, pero esto no siempre es cierto. Navegando hacia el talento explica que hay niños que pasan desapercibidos por no ajustarse a los estereotipos de “inteligencia evidente”. Algunos pueden incluso ser introvertidos o no destacar en la escuela, o tienden a mimetizarse con el entorno, por lo que una identificación correcta es esencial para poder ayudarlos a desarrollar su talento de manera plena.
Si eres padre, educador, o simplemente alguien interesado en comprender mejor las altas capacidades, Navegando hacia el talento te proporcionará una visión completa y realista. Este libro desmitifica las ideas erróneas y ofrece una guía práctica para apoyar a estos niños de manera efectiva. ¡Te invito a leerlo y descubrir una nueva perspectiva sobre las altas capacidades!