El experto en tendencias del trabajo advierte de que el empleo tal como lo conocíamos ha cambiado para siempre: la irrupción de la IA lo sacude, y las empresas ya no solo deben ser ágiles, sino también resilientes
Glòria Ayuso, Barcelona
Jordi Serrano es futurista, consultor y fundador de Future for Work Institute. Especializado en analizar tendencias del empleo y la transformación del mundo laboral, asesora a los departamentos de Recursos Humanos de las compañías. Para Serrano, la rapidez con la que cambian las herramientas, los procesos y las necesidades del mercado hace que el aprendizaje continuo deje de ser una opción para convertirse en una necesidad.
¿Cuál es su labor en Future for Work Institute?
Explicamos a los departamentos de Recursos Humanos cómo está el mundo para que puedan adaptarse al futuro del trabajo y sus tendencias.
¿Cómo deben prepararse las organizaciones?
Vivimos en un mundo incierto, lo vemos con fenómenos como el auge de Trump. Las organizaciones ya no solo buscan ser ágiles, sino resilientes: el objetivo es poder adaptarse a cambios constantes. Esto implica volverse más flexibles. La tendencia en las empresas se dirige a la gestión por capacidades frente a la gestión tradicional por puesto de trabajo. Es decir, se selecciona, gestiona y promociona en función de capacidades individuales concretas necesarias en cada momento, más que por un puesto de trabajo o una titulación general.
Las organizaciones ya no solo buscan ser ágiles, sino resilientes: el objetivo es poder adaptarse a cambios constantes.
¿Eso qué implica para los trabajadores?
Ya no se trabaja en un puesto fijo toda la vida. Se demanda más autonomía: personas capaces de reaccionar, adaptarse y no esperar instrucciones. Van surgiendo nuevas iniciativas, como las empresas sin jefes. Pequeñas organizaciones, y también grandes, están cambiando la forma de trabajar, y funcionan en grupos pequeños y autónomos.
En 2013 ya anticipó la repercusión de la automatización en ‘El ocaso del empleo’. ¿Con la irrupción de la IA veremos una rápida transformación del mercado laboral?
En el libro explicamos cómo la automatización transformaría radicalmente el empleo. Hasta 2021 se hablaba del reskilling: formar a personas que hacían trabajos manuales o repetitivos para que puedan trabajar en el mundo digital y a tareas más creativas. Pero con la llegada de la IA, todo se acelera. Es otra sacudida, incluso las tareas digitales están en cuestión.
La formación, ¿debe transformarse también?
El sistema escolar lleva tiempo en revisión, intentando enseñar a los niños habilidades clave, trabajar por proyectos… la tendencia se dirige hacia no enseñar a memorizar contenidos, sino a desarrollar habilidades para moverse en un mundo cambiante. En la universidad, ha habido una explosión de grados y oferta con un nivel de especialización muy alto. En un contexto en el que el aprendizaje es permanente, han aparecido también las microcredenciales, que son la revolución actual de la universidad.
¿En qué consisten?
Son pequeñas certificaciones que permiten adquirir conocimientos y competencias de manera flexible y adaptada a las necesidades de cada persona. El objetivo es facilitar trayectorias profesionales y de aprendizaje personalizados.
Pasamos de un modelo donde estudias unos años, trabajas y te jubilas, a otro donde estudiar, trabajar… y volver a estudiar. Así será el nuevo ciclo laboral, en el que nos seguiremos formando durante toda la vida. Además, se alarga la vida laboral, y es probable que cambies de carrera, de sector, e incluso de puesto dentro de una misma empresa.
Pasamos de un modelo donde estudias unos años, trabajas y te jubilas, a otro donde estudiar, trabajar… y volver a estudiar. Así será el nuevo ciclo laboral.
¿La oferta formativa responde a las nuevas necesidades?
La explosión de másteres va en esta dirección: másteres especializados en un tema concreto, más cortos… También hay que revalorizar la FP, porque responde a muchas de las necesidades de las empresas. El Parlamento Europeo, en una apuesta por el aprendizaje continuo, ha urgido a adaptar la educación a un mercado laboral con grandes cambios. El Consejo Europeo impulsa un enfoque común sobre microcredenciales para facilitar su reconocimiento en toda la UE.
Frente a la irrupción de la IA, ¿qué es mejor estudiar?
Estamos en un momento de transición. En muchas profesiones, la IA ya tiene un impacto importante, como en traducción. La universidad debe adaptar sus titulaciones y dar herramientas a los estudiantes para usar estas tecnologías. Quien usaba el destornillador manual se quedó atrás frente a quien empezó con el eléctrico. Shopify ya dice que quiere trabajadores formados en IA. Mi hijo estudia diseño de moda y ya tiene una asignatura sobre el uso de la IA.
Quien usaba el destornillador manual se quedó atrás frente a quien empezó a usar el eléctrico. Shopify ya dice que quiere trabajadores formados en IA.
¿Qué valoran los departamentos de RRHH en el trabajador?
Las empresas valoran, más allá de la titulación básica, las habilidades blandas: capacidad de liderazgo, de adaptación… Desarrollar competencias como la capacidad de adaptación va en la buena dirección. En adelante lo importante será el aprendizaje a lo largo de la vida. Tendremos que estar actualizándonos porque el mundo no se detiene.
¿Eso significa que veremos cada vez a más personas mayores estudiando?
Hay que tener en cuenta que España es el país más envejecido, con una edad media alta. Los mayores serán los primeros que querrán seguir formándose para mantener sus empleos. Nuestra fuerza laboral es senior. Solemos asociar la innovación y la tecnología a los jóvenes, y eso debe cambiar. Pero los seniors aún no nos estamos poniendo al día.
