Por Yuan Yuan
Trabajadores clasifican fibras de bambú en la ciudad de Fuxing, provincia de Guizhou, el 11 de abril (Xinhua)
Ante el creciente peligro medioambiental del plástico, la búsqueda de soluciones sostenibles es más urgente que nunca. Entra en escena el bambú: una alternativa versátil y ecológica que está preparada para revolucionar nuestro enfoque para combatir la contaminación por plásticos.
En el condado de Anji, en la provincia de Zhejiang, en el este de China, una bolsa biodegradable hecha de fibra de bambú está revolucionando la forma en que los lugareños compran, ofreciendo un sustituto prometedor de las bolsas de plástico tradicionales. Conocida como una «ciudad de bambú» en China con más de 66.660 hectáreas de bosques de bambú, Anji ha estado explorando el uso de materiales de bambú para reemplazar los materiales plásticos existentes durante varios años.
Las bolsas de fibra de bambú, desarrolladas por una empresa tecnológica local, se producen procesando bambú moso, una especie dominante de bambú de madera nativa de China, en polvo de bambú. A continuación, el polvo se combina con resinas y otros materiales mediante una técnica de bobinado, lo que da como resultado un producto totalmente biodegradable. Las bolsas se degradan naturalmente en seis meses, alcanzando una tasa de degradación de más del 93 por ciento, y ahora se están produciendo en masa.
Estas bolsas ahora se han adoptado ampliamente en los mercados de agricultores de Anji y otros lugares comerciales con alto tráfico peatonal.
Un sustituto adecuado
Como estas bolsas de fibra de bambú son actualmente más caras que las bolsas de plástico ordinarias, el gobierno local ha proporcionado subsidios para compensar el costo más alto.
«Una bolsa de plástico normal cuesta 0,1 yuanes (0,014 dólares), mientras que esta bolsa de bambú cuesta un poco más, 0,2 yuanes», dijo el residente local Wu Ying al periódico Huzhou Daily. «Sin embargo, con subsidios que cubren la mitad del costo, el precio es comparable al de las bolsas de plástico normales. Además, contribuye a la protección del medio ambiente».
Rica en recursos de bambú, China lanzó en 2022 la Iniciativa sobre el bambú como sustituto del plástico en colaboración con la Organización Internacional del Bambú y el Ratán.
En noviembre pasado, China lanzó un plan de acción de tres años para abordar el cambio climático y reducir la contaminación mediante la sustitución de productos de plástico por alternativas al bambú. Para 2025, la iniciativa tiene como objetivo mejorar la calidad, la diversidad, la escala y la rentabilidad de los sustitutos del bambú.
Anji es el hogar de más de 900 empresas de productos de bambú, que abarcan toda la cadena de producción, desde el procesamiento de bambú crudo hasta la fabricación de una variedad de productos de bambú. Entre estas, varias empresas están a la vanguardia de la Iniciativa Bambú como Sustituto del Plástico.
Establecida en 2005, BambooMake Co. Ltd., como la mayoría de las empresas locales de bambú en Anji, inicialmente se centró en el procesamiento primario de bambú crudo. Cuando Liang Fenghui asumió el liderazgo de la empresa de su padre en 2014, reconoció la necesidad apremiante de un enfoque transformador de la producción.
«En ese momento, nuestros principales productos eran principalmente artículos procesados como cañas de bambú y cercas, que ofrecían un bajo valor agregado y bajos márgenes de ganancia. Junto con los cambios en el entorno del mercado, las regulaciones ambientales más estrictas y el aumento de los costos laborales, la compañía tuvo que manejar una serie de desafíos operativos», dijo a China News Service. Esta constatación lo motivó a priorizar la sostenibilidad ambiental como una vía para el desarrollo.
Impulsada por la investigación y el desarrollo (I&D) internos, la compañía introdujo nuevos productos como pajitas de bambú, cajas de almacenamiento de bambú y cepillos de dientes de bambú. «Ahora, nuestros productos son respetuosos con el medio ambiente y nuestros métodos de producción son más sostenibles. Nuestros equipos de desarrollo propio han aumentado la tasa de utilización de materias primas en al menos un 20 por ciento», dijo.
En la actualidad, el valor de la producción anual de la empresa ha superado los 100 millones de yuanes (13,8 millones de dólares).
Anji fabrica más de 10.000 tipos de productos de bambú desechables, con un valor de producción anual de la industria del bambú que supera los 20.000 millones de yuanes (2.750 millones de dólares). Este éxito simboliza una doble victoria: revitalizar la industria del bambú y hacer frente a la contaminación por plásticos.
Otras importantes regiones productoras de bambú en China también están avanzando rápidamente. En Yichun, provincia de Jiangxi, Lin Wei, gerente de investigación y desarrollo de una empresa local, ha sido pionero en el uso del bambú en productos relacionados con la tecnología, desarrollando artículos como teclados de bambú, unidades USB, ratones y calculadoras.
«La versión inicial del teclado de bambú solo tenía un marco de bambú, mientras que las teclas todavía estaban hechas de plástico. Nuestro equipo de investigación y desarrollo pasó por más de 1.000 prototipos antes de finalmente diseñar una máquina diseñada específicamente para producir teclas de bambú», dijo Lin Wei a la Televisión Central de China.
Alentados por el éxito del teclado de bambú, Lin y su equipo continuaron innovando, desarrollando más de 80 variedades de productos de bambú, incluidos ratones de bambú y calculadoras.
«Desde que se lanzó la Iniciativa Bambú como Sustituto del Plástico en 2022, nuestro gobierno local ha ofrecido numerosos incentivos y un mayor apoyo a las empresas de procesamiento de bambú», dijo Lin. «Estamos viendo un gran potencial en este mercado».
¿Más barato por docenas?
A pesar de los importantes avances en la investigación y aplicación de los productos de bambú, sigue existiendo una cuestión crítica antes de que se pueda lograr una promoción y un uso generalizados: el costo.
En la 16ª Feria Internacional de Productos Forestales de China Yiwu el pasado mes de noviembre, el área de exposición de la Iniciativa Bambú como sustituto del plástico atrajo a unas 130 empresas de provincias como Zhejiang, Fujian y Sichuan. La exposición atrajo a clientes nacionales e internacionales, pero muchos compradores potenciales expresaron su preocupación por el alto costo de los productos de bambú, en comparación con sus contrapartes de plástico. Por ejemplo, una cuchara de bambú cuesta actualmente 10 veces más que su homóloga de plástico.
«La iniciativa presenta una gran oportunidad de mercado, sin embargo, los productos de bambú actualmente representan menos del 1 por ciento de la cuota de mercado en reemplazos de productos de plástico, siendo el costo la principal barrera», dijo Cai Wei, director ejecutivo de la Asociación de la Industria del Bambú de China, a China News Service.
El costo relativamente alto de la cosecha de bambú, junto con los altos costos de procesamiento, aumenta los costos en cada etapa, dijo Cai.
En respuesta, Anji está buscando activamente formas de equilibrar los beneficios ecológicos y económicos. Por ejemplo, en el transporte de bambú en bruto, las empresas del condado han comenzado a probar el uso de drones.
«En un bosque de bambú que cubre aproximadamente 0,7 hectáreas, los métodos tradicionales de cosecha manual requerirían al menos de ocho a 10 trabajadores. El costo combinado de la mano de obra y el transporte da como resultado el alto costo de la materia prima de los productos de bambú», dijo Zhong Weirong, funcionario de la Oficina Forestal del Condado de Anji, al periódico Guangming Daily. «El transporte con drones aún está en su etapa experimental, pero si se puede ampliar, podría reducir significativamente los costos».
En octubre de 2023, se estableció la Academia Nacional de la Industria del Bambú de China en Anji para realizar experimentos. «Todos nuestros proyectos deben tener una base de industrialización», dijo Zhang Yahui, entonces presidente de la academia, al Guangming Daily. «Al integrar la producción, la educación y la investigación, nuestro objetivo es abordar los desafíos actuales de la industria de altos costos de cosecha y baja eficiencia de escala».
Las empresas locales están colaborando con la academia para desarrollar una máquina de corte de precisión de bambú desechable con control numérico computarizado (CNC) que ya ha entrado en producción, lo que reduce el desperdicio de material y reduce los costos.
El mecanizado de precisión CNC es un proceso que utiliza programas informáticos para crear productos con medidas exactas.
«Las empresas locales también han establecido asociaciones con expertos de la Academia China de Silvicultura y la Academia Provincial de Silvicultura de Zhejiang. Se está incubando un lote de nuevos proyectos», dijo Zhang. BR
Editado por Elsbeth van Paridon
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