INTUICIÓN. Por intuición, los idealistas entienden una facultad especial de contemplación espiritual, un estado de revelación que permitiría al hombre conocer la verdad sin la intervención de una actividad racional y lógica más allá de la conciencia. Así interpretada, la intuición se reduce a una facultad mística y misteriosa de conocimiento irracional (Schelling, V., Hartmann, Bergson, V.).
Para el materialista Spinoza, la intuición tiene un carácter racionalista y significa un conocimiento superior de la naturaleza, un conocimiento racional, no oscurecido por pasiones y sentimientos. Los idealistas hacen de la intuición un concepto místico con el pretexto de que la conciencia es a veces capaz de encontrar «de repente» la solución a tal o cual problema.
En realidad, como enseña el materialismo dialéctico, si la conciencia a veces adivina la verdad por intuición, la debe a la experiencia, a los conocimientos concretos adquiridos previamente. El materialismo dialéctico rechaza la interpretación idealista de la intuición como un tipo especial e innato de conocimiento que no se basa en la práctica y excluye la actividad lógica de la conciencia.
INTUICIONISMO. Una corriente filosófica reaccionaria, un idealista subjetivo en filosofía. Repele todo conocimiento del mundo por los sentidos, la razón y la actividad práctica.
Considerando a la intuición como la única fuente del conocimiento actual, da una interpretación idealista de la intuición como una facultad particular y mística del «subconsciente». Bergson (V.) es el representante más notorio del intuicionismo en la filosofía burguesa contemporánea
IRRACIONAL. Inaccesible a la razón, al pensamiento, inexpresable en nociones lógicas. El término «irracional» se utiliza generalmente para designar la corriente filosófica idealista que niega a la razón, al pensamiento y a la ciencia la capacidad de conocer la verdad, abogando por la primacía de la voluntad, el instinto, la intuición, las fuerzas ciegas e inconscientes.
Esta corriente está representada por Schopenhauer (V.), Nietzsche (V.), Bergson (V.), James (V.), Dewey (V.) y otros.
Los partidarios del irracionalismo, que está muy extendido en la filosofía reaccionaria contemporánea y penetra incluso en ciencias como la biología, la psicología y la sociología, se levantan contra el marxismo, el materialismo e incluso contra las variedades de idealismo que admiten en lo más mínimo la posibilidad del conocimiento racional.
La negación de la posibilidad de conocer el mundo exterior, la negación de la ciencia, el oscurantismo abierto y el misticismo están en la base de las doctrinas filosóficas que propugnan el irracionalismo.
Los ideólogos de las clases reaccionarias son los responsables de impedir la difusión de la luminosa concepción materialista del mundo y de las leyes del desarrollo social: estas son las raíces sociales del irracionalismo.