Graciliano Ramos – Sobre la uniformidad

Correo
Facebook
Telegram
Twitter
WhatsApp

SERVIR AL PUEBLO

Nueva publicación de la Unidad Roja – LJR

A continuación publicamos un brillante extracto del libro “A Viagem”, de Graciliano Ramos, que retrata su estancia en la patria socialista, la URSS, en 1952. En este pasaje, Graciliano observa la uniformidad del pueblo soviético, que es la uniformidad típica de la clase trabajadora.

“En las amplias salas, los jugadores, ocupados jugando al ajedrez, ni siquiera parecían notar nuestra presencia. Me sorprendió no distinguir en ellos ninguno de los signos visibles entre nosotros, la clase trabajadora: gestos esquivos, miradas suspicaces, modales bovinos, signos de lentitud en el pensamiento. Parecen desconfiar de las criaturas educadas y bien vestidas. Cierto crítico, hace años, me sugirió que utilizara a los campesinos del Nordeste en una novela. A pesar de ser un hombre del bosque, me creía incapaz de hacer esto, y antes de vivir con estos hombres en prisión, durmiendo sobre las esteras podridas y compartiendo fraternalmente las chinches, no me había arriesgado a aceptar sus consejos. Aquí las diferencias se atenuaron, finalmente desaparecieron; Los individuos que juegan al ajedrez son aparentemente iguales a nosotros, no tienen por qué considerarnos enemigos. Por supuesto, todavía estamos lejos de ellos: somos extranjeros y, aunque vivimos de nuestro trabajo, hemos sido criados con reverencia por los tipos hábiles que viven del trabajo de otros. Y nos sorprende que aquí se hayan borrado las diferencias. Mientras caminaba por Moscú se me ocurrió hacer una pregunta: – ‘Mme. Nikolskaya, ¿esta chica de aquí trabaja en un taller o en una oficina pública? La señora Nikolskaya examinó a la mujer por todos lados y concluyó: “Es imposible saberlo. No encontramos ninguna distinción.» La señora Nikolskaya, moscovita, se había mostrado incapaz de satisfacer mi curiosidad. Una profesión no es superior a otra y los hombres tienden a estandarizarse. Esta idea choca con nuestro individualismo pequeñoburgués: encontramos ventajas en las discrepancias, tememos convertirnos en un rebaño. Y ni siquiera nos damos cuenta de que somos un rebaño heterogéneo, mediocre, dócil al dueño. Queremos conservar el estúpido privilegio de no parecernos a nuestro vecino. Al debilitarnos, nos creemos fuertes. Realmente somos bestias”.

Nuestro periodismo es democrático e independiente . Si te gusta nuestro trabajo, apóyanos tú también. Página informativa sobre eventos que ocurren en el mundo y sobre todo en nuestro país, ya que como dice nuestro editorial; creemos que todo no está perdido. Sabemos que esta democracia está presa sin posibilidad de salvarse aunque su agonía es lenta. Tenemos que empujar las puertas, son pesadas, por eso, necesitamos la cooperación de todos. Soñamos con una patria próspera y feliz, como idealizó el patricio Juan Pablo Duarte. necesitamos más que nunca vuestra cooperación. Haciendo clic AQUÍ ó en el botón rojo de arriba
Correo
Facebook
Telegram
Twitter
WhatsApp

Noticas Recientes

Opinión