Los soldados soviéticos Yegorov y Kantaria izan la bandera roja sobre el Reichstag, símbolo de la derrota del nazi-fascismo.
El 9 de mayo de 1945 se produce la rendición incondicional de la Alemania nazi frente a la delegación soviética en Berlín, en un documento por el cual se reconoció la victoria del ejercito de la URSS.
Seis años de guerra 1939-1945, más de sesenta millones de muertes, siendo la Unión Soviética, China y Alemania las naciones que más víctimas tuvieron.
Este día de conmemoración no debemos permitir que se tergiverse la verdad y es necesario reconocer el papel insustituible de la Unión Soviética en la victoria sobre el nazismo y el fascismo.
La llegada al poder del nazi-fascismo no fue casual, obedecía a intereses de la burguesía. No debemos olvidar que ante cualquier resistencia que pueda poner en peligro los intereses y los beneficios de las oligarquías, se puede dar un intento de represión, ya sea por la vía judicial o extrajudicial.
Fue el capitalismo y el imperialismo quienes crearon las condiciones para el surgimiento del fascismo en el mundo. Desde el primer día Hitler declaró que su intención era acabar con la Unión Soviética, defender sus ideas racistas y el exterminio de pueblos enteros.
El ejército nazi se paseaba victorioso por Europa, su táctica de guerra relámpago anexionaba territorios sin resistencia alguna por parte de los gobiernos europeos colaboradores necesarios para su victoria, sólo el pueblo organizado en la resistencia se enfrentaba a un gigantesco ejército que parecía invencible.
Las fuerzas nazis de Hitler estaban convencidas que la invasión de la Unión Soviética sería fácil como lo fue la invasión de gran parte de Europa, pero encontraron un ejército y un pueblo heroico dispuesto a defender el socialismo y luchar contra el fascismo.
Leningrado (la ciudad de Lenin) paró al fascismo, resistió el cerco fascista durante 900 días. Las tropas fascistas se acercaron a Moscú, pero Moscú no sólo resistía sino que contraatacaba. Los nazis tomaron una parte de Stalingrado pero las tropas soviéticas resistieron y allí se libró la más grande batalla de la historia y el inicio de la derrota del fascismo.
El ejército soviético tomó la ofensiva y se inicia el avance hacia el territorio del fascismo, no se detendrán hasta llegar al corazón mismo de la Alemania fascista; el 30 de abril de 1945 cayó Berlín, y el día 9 de mayo el Reichstag fue coronado con la victoriosa bandera del pueblo soviético.
Importante fue el sacrificio que hicieron muchos pueblos de Europa, la heroica resistencia combatiendo el fascismo, reconocer la contribución a la victoria contra el fascismo de todas las fuerzas que participaron en la alianza antifascista, es un acto de memoria. Pero es un hecho que durante muchos años se trató de disminuir el papel que había tenido la Unión Soviética en la victoria contra el fascismo.
El gobierno de España ha declarado el 5 de mayo como “día de homenaje a los españoles y españolas deportados en Mauthausen y en otros campos, y a todas las víctimas del nazismo en España”. Más de 5000 murieron en los campos de concentración nazis. Un día donde, una vez más, una parte del gobierno mantiene un perfil bajo a la hora de reconocer a las víctimas que dieron su vida por la libertad, la democracia y la justicia social; han sido una vez más las cientos de plataformas memorialistas quienes han celebrado actos de memoria y reconocimiento, con escasa o nula presencia de las autoridades.
La II Guerra Mundial duró seis años, cobrándose más vidas y destruyendo más territorios que cualquier guerra antes conocida, exterminando en los campos de concentración a judíos, gitanos, homosexuales, comunistas, socialistas, muerte y destrucción que parece que se olvida. Más de 50 guerras o conflictos armados de “ baja intensidad” están abiertas en nuestro planeta. Kilómetros de alambradas, y no son los campos de concentración nazis, con los que la propia Europa impide que miles de personas que huyen de la guerra lleguen a su territorio.
La victoria sobre el nazismo y el fascismo es un acontecimiento de importancia histórica que no debemos olvidar, esa victoria tuvo un impacto en todo el curso posterior de la historia mundial y en la solución de un problema fundamental en aquel momento, el colonialismo. Al comienzo de la II Guerra Mundial, el 77% del planeta estaba bajo el sistema colonial, en la década de los 70 unos 100 países habían sustituido el sistema colonial por Estados soberanos.
Ante nuestros ojos vemos cómo las bandas neonazis y fascistas ganan fuerza en Europa y América Latina; Europa debería ya poner en marcha leyes contra el fascismo, neofascismo y expresiones similares, en la línea planteada por países como Bolivia y Venezuela.
El 9 de mayo debe servir para conmemorar la victoria sobre el nazismo y el fascismo y grabar en nuestra memoria que el fascismo es una amenaza que pone en peligro la paz mundial.
Fascismo nunca más
(*) Responsable de Memoria Democrática del PCE