
Llamamiento de la Federación General de Sindicatos de Gaza a los sindicatos de Estados Unidos en vísperas del Día Internacional de los Trabajadores, el 1 de mayo.
A los Sindicatos Libres de los Estados Unidos de América y a todos los trabajadores y sindicalistas libres que luchan por la justicia, la libertad y la dignidad humana:
Les saludamos en vísperas del Día Internacional de los Trabajadores, un día que encarna la unidad y la solidaridad de los trabajadores para hacer frente a la opresión y la explotación. Elevamos la voz de los trabajadores de Gaza, que hoy están a la vanguardia de la lucha contra las formas más atroces de genocidio, asedio y hambruna, impuestas a nuestro pueblo durante décadas y que continúan hasta el día de hoy con el apoyo directo de la administración estadounidense bajo Donald Trump, y las administraciones anteriores, en flagrante violación de todas las leyes humanitarias e internacionales.
Durante más de 16 meses, Gaza ha sido objeto de un ataque brutal que ha resultado en el martirio de decenas de miles de civiles inocentes, incluidos miles de trabajadores, junto con la destrucción sistemática de infraestructura, hogares, hospitales, escuelas y fábricas. La ocupación ha despojado a Gaza de todos los medios de vida, sin librar a ningún sector productivo o de servicios de la devastación sistemática, lo que ha llevado al colapso de la atención médica, los servicios públicos, la educación y la economía. Millones de palestinos se encuentran ahora desplazados, sin alimentos, agua, refugio, electricidad ni medicinas.
El genocidio se encuentra en una peligrosa escalada. La ocupación continúa su política de hambruna colectiva cerrando los cruces e impidiendo la entrada de ayuda humanitaria, poniendo a nuestro pueblo en riesgo de hambruna masiva mientras la comunidad internacional sigue impotente, en silencio o incluso cómplice de este crimen de lesa humanidad. Estas políticas no tienen como único objetivo subyugar a nuestro pueblo, sino que forman parte de un régimen colonial de asentamientos destinado a borrar por completo la existencia palestina.
Los trabajadores de Gaza se encuentran entre los más afectados por esta catástrofe. La vida económica se ha detenido por completo, los lugares de trabajo han sido destruidos y decenas de miles de personas se han visto obligadas a permanecer en el desempleo, sin que existan redes de seguridad social. Hoy en día, los trabajadores y sus familias viven en condiciones inhumanas, privados de sus derechos más básicos, luchando por sobrevivir, ya sea por hambre o bajo bombardeos.
Queridos camaradas:
Esta guerra no habría sido posible sin el apoyo ilimitado de Estados Unidos a la ocupación, ya sea a través de fondos militares, respaldo político y diplomático o acuerdos de armas que matan a nuestros niños, mujeres y ancianos todos los días. El gobierno de Estados Unidos bajo Trump ha continuado lo que el gobierno anterior comenzó, convirtiéndose en cómplice directo del genocidio, ignorando las voces de millones de personas dentro y fuera de Estados Unidos, y de una abrumadora mayoría de la nación, que rechazan esta brutal agresión.
Por lo tanto, hacemos un llamado a ustedes, los sindicatos estadounidenses, para que traduzcan su solidaridad en acciones efectivas que vayan más allá de las declaraciones y discursos y creen una presión real para detener esta guerra sucia.
Lo que les pedimos hoy:
1. Aumentar la presión dentro de los lugares de trabajo y las instituciones estadounidenses de toma de decisiones para poner fin al apoyo militar, financiero y diplomático proporcionado por la administración estadounidense a la ocupación y hacer rendir cuentas a las empresas e instituciones involucradas en el financiamiento y apoyo a la maquinaria de guerra de Israel y el genocidio.
2. Unirse y ampliar las actuales campañas de boicot dirigidas a las empresas israelíes y sus partidarios, especialmente en los sectores del transporte marítimo y la logística. Esto incluye el boicot a los barcos israelíes como «ZIM» y el cese de los negocios con empresas que transportan armas y equipos militares a la ocupación, como «Maersk» y otras.
3. Aplicar sanciones laborales en los puertos y aeropuertos de EE.UU. para bloquear los envíos de armas a Israel, siguiendo el ejemplo de los movimientos sindicales anteriores que boicotearon la Sudáfrica del apartheid y a otros trabajadores en todo el mundo.
4. Apoyar y coordinar esfuerzos con el movimiento estudiantil en los EE.UU., que enfrenta una severa represión por su postura de principios en apoyo a la causa palestina. La solidaridad entre los movimientos obrero y estudiantil puede crear una inmensa presión contra las políticas injustas de la administración estadounidense y responder eficazmente al amplio asalto de la administración Trump contra las libertades civiles y la libertad de expresión.
5. Llamar a huelgas generales y a la desobediencia civil generalizada para exponer la complicidad del gobierno de Estados Unidos en la guerra y hacerlo responsable de los crímenes de la ocupación, tal como lo han hecho los movimientos obreros en luchas pasadas contra las guerras imperialistas.
6. Presionar al Congreso y a la administración estadounidense para que detengan los envíos de armas y ayuda militar a Israel y cancelen cualquier acuerdo que refuerce el colonialismo y la opresión a expensas de los pueblos oprimidos.
Estimados miembros del movimiento obrero en América,
Apreciamos sinceramente todos los esfuerzos realizados por los sindicatos estadounidenses y las voces que se han solidarizado con la causa palestina. Además, enfatizamos que la etapa actual exige que estos esfuerzos se desarrollen de manera acumulativa, transformando la solidaridad en acciones prácticas y sostenibles que contribuyan a detener el derramamiento de sangre palestino, poner fin a la ocupación y el asedio y lograr la justicia para nuestro pueblo.
Nosotros, en la Federación General de Sindicatos de Gaza, les dirigimos este llamamiento en vísperas del Día Internacional de los Trabajadores, afirmando que su lucha por los derechos de los trabajadores en los Estados Unidos es inseparable de nuestra lucha contra la ocupación y el colonialismo. La verdadera solidaridad laboral se demuestra con acciones, no solo con palabras, y contamos con su conciencia y determinación para tomar medidas concretas para poner fin a esta tragedia.
Es nuestra responsabilidad colectiva, como sindicatos y movimientos laborales de todo el mundo, oponernos a la injusticia y utilizar nuestro poder colectivo para generar cambios. Juntos, podemos romper las cadenas de la ocupación, poner fin a la opresión y construir un mundo más justo y humano.
Viva la unidad y la solidaridad de los trabajadores… ¡Viva la lucha de los pueblos por la libertad, la dignidad y la justicia!
Basheer Al-Sisi, Secretaría General de la Federación General de Sindicatos de Palestina
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Ciudad de Gaza
FUENTE: solidarityinfoservice.org 9 de abril de 2025