Llamado desde las tierras del Norte y Este de Siria a los pueblos del mundo:
¡Defendamos la revolución de las mujeres de Rojava!
En estos días, nuestra revolución en Rojava, el norte y el este de Siria se mantiene firme como una roca contra la tormenta bajo la amenaza del levantamiento de las bandas y estados patriarcales fascistas islámicos. Como pueblos que vivimos en el corazón de Oriente Medio, luchamos y resistimos en el frente, en las trincheras de guerra, en las ciudades, pueblos y en las fronteras para defender la revolución democrática y la revolución de las mujeres en nuestro territorio. No tenemos miedo de los ataques de los estados y bandas fascistas islámicos. No conocemos el significado del miedo. Incluso si llueven bombas sobre nosotros, nunca nos detendremos para defender nuestras posiciones, nuestras trincheras, nuestros pueblos, ciudades y territorios.
Bandas fascistas islámicas gobiernan Siria
Hace casi dos meses, Hayat Tahrir al-Sham derrocó al régimen asesino de los colonos de Assad y se hizo con el poder en el estado burgués de Siria. La banda política islámica HTS, que se ha hecho fuerte gracias al apoyo de estados imperialistas y estados regionales regresivos como Turquía e Israel, se está poniendo una máscara de democracia para consolidar su posición. Ahmed al-Shara, alias Abu Muhammad al-Jawlani, que llegó a Siria en 2012 con la misión de construir la rama siria del Estado Islámico, está tratando de engañar a los pueblos de Siria y del mundo con charlas sobre democracia, derechos de las mujeres y libertad. Ha hecho que el juez de la sharia Shadi al-Veysi, conocido por castigar públicamente a las mujeres con la muerte por “fornicación”, se siente en una silla de “Ministro de Justicia”. Está llenando los puestos del gobierno con sus viejos amigos del Estado Islámico.
Mientras el HTS representa una tragicomedia en el escenario del gobierno, podemos observar las torturas y masacres que comete. Vemos al HTS cercando a familias de confesión alauita en sus casas, quemándolas junto con sus hijos. Vemos al HTS violando a mujeres y niñas, secuestrando niños y utilizando métodos de tortura como la electricidad y arrancando las uñas. También fuimos testigos de cómo el HTS distribuía ropas de la Sharia a las mujeres. Al mismo tiempo, escuchamos a la Oficina para Asuntos de la Mujer del gobierno del HTS, propagando la “gran política de mujeres del AKP”.
Bandas políticas fascistas islámicas atacan la Revolución de Rojava
En el norte de Siria, el Estado político islámico-fascista turco, en alianza con las bandas del HTS, ataca los territorios de Rojava y nuestra autoadministración democrática en el norte de Siria, utilizando sus bandas políticas islámico-fascistas, que llevan el nombre de “Ejército Nacional Sirio”. Mientras el HTS tomaba el gobierno en Damasco, las bandas políticas islámico-fascistas del Estado turco iniciaron una guerra de ocupación contra las regiones de Til Rifat y Shehba. Cientos de miles de refugiados tuvieron que huir nuevamente de los lugares donde habían encontrado refugio. Al ocupar Minbiç y cruzar el Éufrates, el Estado fascista turco está tratando de hacer realidad su sueño de ocupar Kobanê. Al mismo tiempo, deja que llueva con bombas la región que se extiende a lo largo de 30 km hasta la carretera M4, que no pudo ocupar en 2019.
La resistencia revolucionaria de los pueblos unidos es inquebrantable
Pero el Estado turco fascista patriarcal y sus bandas no son capaces de romper la resistencia de nuestros pueblos revolucionarios. Durante semanas no han podido avanzar en la región de Qereqozak y en la presa de Tişrîn. No consiguen pasar de Minbiç a la orilla oriental del Éufrates, donde también se encuentra Kobane. En Qereqozak y Tişrîn, las bandas del Estado turco se enfrentan a la férrea resistencia de nuestras fuerzas militares SDF. Mientras venimos con miles de corazones revolucionarios kurdos, árabes, asirios, sirios, yazidíes, turcomanos y armenios desde todas las partes de nuestro territorio autónomo para crear un escudo vivo contra los ataques de ocupación de las bandas políticas patriarcales islamistas-fascistas, el Estado turco nos está lanzando bombas. Pero nuestros pueblos, mientras por un lado recogen los cadáveres de nuestros compañeros caídos, por otro lado siguen caminando gritando «Viva la resistencia de las SDF». Incluso bajo una lluvia de bombas nuestros pueblos no dejan de bailar “halay” mientras forman un Escudo Viviente en la presa de Tişrîn. Dan al mundo un ejemplo del poder de la resistencia, el sacrificio y la valentía de los pueblos unidos.
Cada lugar es parte de la resistencia.
En cada lugar de Rojava nuestros pueblos están participando en esta guerra revolucionaria popular. Mientras en la frontera las fuerzas militares profesionales de las SDF mantienen sus posiciones, en las ciudades y pueblos los pueblos están creando nuevos batallones, las fuerzas armadas de la guerra revolucionaria popular están organizadas. Contra la probabilidad de ataques de bandas islámicas políticas, que se esconden dentro de las regiones de la autoadministración revolucionaria, las unidades de autodefensa popular están protegiendo las calles y las casas. En los barrios la gente está reuniendo bienes y compartiendo sus propiedades para cubrir las necesidades de los refugiados que llegan de las zonas de guerra. Las madres están preparando toneladas de comida para enviarla a los que luchan en el frente. Miles de personas en el lado norte del Kurdistán están cumpliendo con su deber en la frontera contra la amenaza de que el estado turco lleve a cabo también ataques terrestres contra lugares como Qamişlo, que se encuentran cerca de la frontera.
Llamado a los pueblos del mundo: ¡Sean parte de nuestra resistencia!
Como Mujeres Comunistas Revolucionarias (Jinên Komunîst ên Şoreşger/JKŞ), participamos en las primeras líneas de la resistencia y defendemos la revolución de las mujeres de Rojava. Llamamos a los pueblos del mundo: ¡Sé parte de nuestra resistencia! ¡Defendemos la revolución de las mujeres de Rojava! ¡Sé parte de la guerra revolucionaria de los pueblos!
Con el apoyo de las fuerzas imperialistas que se encuentran en la cima de la OTAN, los estados y bandas políticas fascistas islamistas construyen sus poderes hostiles a las mujeres en Oriente Medio. En medio de esta oscuridad patriarcal, nuestra revolución de Rojava, el norte y el este de Siria, se mantiene firme como una roca que sostiene la luz de la revolución de las mujeres.
Si venís aquí para apoyarnos hombro con hombro o si reforzáis la lucha en el lugar donde estáis: Hagamos de cada lugar y de cada corazón un espacio de nuestra resistencia. Desenmascaremos las mentiras de los estados imperialistas. No permitáis que los estados de las regiones donde vivís apoyen a las fuerzas políticas fascistas islámicas que atacan la revolución de Rojava. No dejéis ningún lugar cómodo y seguro a quienes avivan las llamas del fascismo político islámico mientras se mantienen en un segundo plano. Defended la revolución de Rojava, que es la luz de la esperanza para la lucha por la libertad de las mujeres en el mundo. Conviértanse en chispas de la revolución de las mujeres de Rojava. Enciendan la luz de la revolución de las mujeres de Rojava donde quiera que estén.
¡Viva la resistencia revolucionaria!
¡Viva la hermandad de los pueblos!
¡Viva la revolución de las mujeres de Rojava!
