Júbilo indecible entre los macromillonarios: Musk ganó 41,000 millones de dólares en unos días
La victoria de Trump generó una euforia en Wall Street que elevó las fortunas de grandes multimillonarios como Elon Musk y Brian Armstrong. Sin embargo, este crecimiento plantea serias dudas sobre la concentración de riqueza y las implicaciones para la economía general de Estados Unidos.
POR CÁNDIDO GÁLVEZ PARA CANARIAS SEMANAL.ORG.-
La última semana han sido siete días de grandes movimientos en los mercados financieros estadounidenses. La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales desató una euforia en Wall Street, impulsando los índices bursátiles hacia niveles históricos y elevando las fortunas de varios multimillonarios, especialmente en el sector tecnológico y de criptomonedas.
Sin embargo, más allá de los titulares sobre el rápido incremento en la riqueza de los ultra-ricos, esta situación plantea preguntas importantes sobre la sostenibilidad de este crecimiento y sus efectos en la economía general.
LOS MERCADOS EN ALZA TRAS LA VICTORIA DE TRUMP
Al cierre de la semana, el índice S&P 500 alcanzó brevemente los 6,000 puntos por primera vez en su historia, mientras que el Nasdaq creció un 5.7% y el Dow Jones casi un porcentaje similar.
Este fenómeno, conocido popularmente como el «Trump Bump», refleja la respuesta de los inversores ante las expectativas de una política económica favorable al sector empresarial. Las promesas de recortes en impuestos, reducción de regulaciones y estímulos al sector energético impulsaron las expectativas del mercado.
En declaraciones a CNBC, Dan Ives, analista de Wedbush Securities, explicó:
“Los inversores ven en Trump la posibilidad de un entorno regulador que podría abrir nuevas oportunidades de crecimiento para empresas como Tesla, que han ganado una ventaja en el mercado automotriz eléctrico”.
ELON MUSK Y TESLA: LOS GRANDES GANADORES
Ninguna fortuna creció más esta semana que la de Elon Musk, CEO de Tesla y SpaceX, quien también se ha posicionado como uno de los principales aliados empresariales de Trump. Las acciones de Tesla subieron casi un 30%, aumentando el patrimonio neto de Musk en 41,000 millones de dólares y llevándolo a los 304,000 millones.
Según un informe de Forbes, el respaldo financiero y político de Musk hacia la administración Trump, con una donación de casi 119 millones de dólares a un super PAC pro-Trump, se ha visto recompensado por la perspectiva de políticas que podrían limitar la competencia en el mercado de vehículos eléctricos.
En una nota a los inversores, Ives mencionó:
“Tesla podría beneficiarse de un gobierno que probablemente reduzca o elimine ciertos incentivos fiscales para empresas emergentes en el sector eléctrico, lo cual solidificaría la posición de Tesla como líder en este campo”.
Este respaldo regulador representa una ventaja significativa para Musk en un sector que exige altos costos de innovación y despliegue tecnológico.
AUGE EN EL SECTOR DE CRIPTOMONEDAS Y FINANZAS DIGITALES
Otro de los sectores que experimentó un crecimiento notable tras las elecciones fue el de las criptomonedas. Bitcoin alcanzó los 76,550 dólares, lo que impulsó las acciones de empresas como Coinbase y Robinhood, con aumentos del 48% y 27%, respectivamente. Este ascenso llevó las fortunas de los fundadores de Coinbase, Brian Armstrong y Fred Ehrsam, a incrementar en conjunto más de 4,400 millones de dólares. Armstrong comentó en The Wall Street Journal que
“una Administración favorable a la innovación en criptomonedas podría acelerar la adopción de estos activos en el sistema financiero, permitiendo que más personas accedan a inversiones digitales”.
La situación ha sido recibida con entusiasmo por algunos pequeños inversores, como David Kessler, un minorista con años de experiencia en el mercado, quien expresó:
“Es impresionante ver cómo suben las acciones, pero para nosotros, los pequeños inversores, el impacto no es tan grande como para ellos. Si hay otra recesión, los más afectados seremos nosotros”.
CRECIMIENTO EN EMPRESAS TECNOLÓGICAS Y RESULTADOS TRIMESTRALES
La coyuntura electoral coincidió también con la presentación de sólidos resultados trimestrales de algunas empresas tecnológicas, lo cual impulsó sus acciones aún más. Por ejemplo, AppLovin, empresa dedicada a ofrecer herramientas para el crecimiento de aplicaciones, aumentó su valor en un 77% tras reportar ingresos superiores a las expectativas. Adam Foroughi, CEO de AppLovin, destacó en una entrevista con Bloomberg:
“Estamos mejor posicionados que nunca para crecer bajo un entorno regulador estable y pro-empresarial”.
Este optimismo en las empresas de tecnología refuerza el interés de los inversores por el sector, especialmente en un contexto de recortes fiscales.
Además, empresas de menor escala como Doximity, una red social para médicos, experimentaron aumentos del 38% en sus acciones gracias a un “trimestre explosivo”, en palabras de los analistas de Canaccord Genuity, reflejando que tanto los grandes como los pequeños jugadores del sector tecnológico están beneficiándose de esta racha.
CRÍTICAS A LA CONCENTRACIÓN DE RIQUEZA
Pero la mayoría no ve, ni mucho menos, con buenos ojos esta explosión de riqueza en las manos de unos pocos. Según Oxfam America, este tipo de concentración extrema tiende a ampliar las brechas de desigualdad económica, lo que podría empeorar la situación de la clase trabajadora en los próximos años.
Chuck Collins, analista del Institute for Policy Studies, comentó:
“Este tipo de alzas rápidas en las fortunas de multimillonarios nos recuerdan que la riqueza no se distribuye equitativamente. La concentración excesiva de riqueza podría empeorar las condiciones para el trabajador promedio”.
Desde una perspectiva crítica, algunos analistas de MarketWatch han advertido sobre los riesgos de flexibilizar regulaciones que protegen al mercado de excesos financieros. Lily Roberts, economista de esta institución, señaló:
“El entusiasmo actual es positivo para la economía, pero es crucial considerar las posibles consecuencias de relajar regulaciones que mantienen la estabilidad en los mercados”.
TENDENCIA AL CRECIMIENTO DE LAS FORTUNAS INDIVIDUALES
El rápido aumento de la riqueza entre los multimillonarios tras la victoria de Trump plantea interrogantes importantes sobre las dinámicas del capitalismo actual. La concentración de riqueza en el sector tecnológico y de criptomonedas refleja una tendencia hacia el crecimiento de fortunas individuales a ritmos acelerados, mientras que los beneficios para la clase trabajadora y los pequeños inversionistas parecen altamente limitados. A medida que se despliegan nuevas políticas económicas, la sostenibilidad de este «Trump Bump» dependerá de un equilibrio entre incentivar el crecimiento sin comprometer la estabilidad financiera del país.
En cualquier caso, esta alza sorpresa en los mercados estadounidenses no es un reflejo de la prosperidad colectiva, sino de la creciente concentración de capital en manos de una exigua minoría. Los mercados de valores representan una manifestación del capital financiero que busca constantemente expandirse, aún a costa de amplias capas de la población trabajadora. Este crecimiento desmesurado se debe en gran medida a políticas de flexibilización monetaria y estímulos financieros implementados por el Estado, políticas económicas que se verán multiplicadas aún más con el triunfo de Trump. Todo ello ha permitido que los sectores corporativos y los grandes inversores dispongan de capital barato para inflar sus beneficios en bolsa. Sin embargo, estos beneficios son capturados por las élites financieras, mientras el bienestar general se estanca o empeora.
Además, el auge de los mercados se ve impulsado por la expansión de grandes conglomerados que devoran a las pequeñas empresas, eliminando la competencia y formando oligopolios. En paralelo, los salarios reales de los trabajadores no han crecido a la par de los beneficios empresariales, lo cual incrementa la explotación laboral: los trabajadores generan valor que no se les retribuye, y este excedente se acumula en la esfera financiera. Así, el capitalista moderno sigue acumulando riqueza gracias al trabajo de millones, mientras la especulación en los mercados perpetúa una ilusión de prosperidad que no se refleja en las condiciones de vida de la mayoría.
En este sentido, el alza en los mercados estadounidenses es un síntoma de la contradicción central del capitalismo: la acumulación de riqueza en pocas manos a costa del empobrecimiento relativo de la clase trabajadora.