Efectos Secundarios Mortales?: Una opaca realidad detrás de la última adaptación de BioNTech.
En un mundo donde la pandemia ha avivado el temor y la esperanza se deposita en soluciones médicas avanzadas, ¿se están obviando conscientemente los riesgos asociados con las nuevas vacunas de ARNm? ¿Es posible que las corporaciones farmacéuticas y las agencias reguladoras estén minimizando, o incluso ocultando, información crucial sobre efectos secundarios graves y potencialmente mortales?
POR HANSI QUEDNAU, DESDE ALEMANIA PARA CANARIAS SEMANAL
En un mar de silencios e inquietantes interrogantes, el mundo se enfrenta a la tremenda pregunta: ¿Estamos siendo testigos
del ocultamiento de un escándalo farmacéutico de magnitudes incalculables? La interrogante tiene su origen en torno a la vacuna Comirnaty, de BioNTech, la cual ha sido sometida a constantes adaptaciones para combatir variantes del COVID-19, como la omicrón.
Desde septiembre de 2023, BioNTech ha estado implementando adaptaciones de su vacuna de ARNm, todo ello bajo el control de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), que es la institución médica que ha procedido a aprobar sus diferentes versiones.
Pero, en el corazón de estas innovaciones médicas, la inquietud está creciendo por momentos. Los documentos de la EMA, que han pasado de 32 a 536 páginas desde diciembre de 2020, contienen datos alarmantes que plantean preocupaciones por eventos adversos graves, inclusive fatales, relacionados con la vacuna.
EL RETRATO DE UN SECTOR: INTERESES Y SILENCIOS
BioNTech, con el desarrollo de sus adaptaciones vacunales, no solo dicen estar contribuyendo a la salud pública. Pero lo cierto es también, simultáneamente, que están generando ingresos billonarios en sus cuentas bancarias.
No son pocos los que aseguran que detrás de sus informes y los tecnicismos médicos, se está escondiendo la posibilidad de una catástrofe humana en la que los intereses económicos y políticos están eclipsando los daños palpables para la humanidad.
La pregunta clave que muchos se empiezan a formular es: ¿en qué momento los efectos de un fármaco deberían a empezar a ser considerados como suficientes para proceder a paralizar su producción y su distribución en el mercado?
La perseverante resistencia de las entidades científicas y políticas a abordar este tipo de preguntas, con la urgencia que requieren, pone de manifiesto un escenario donde la equidad y la vida humana parecen ocupar un segundo plano ante la influencia de una industria farmacéutica multimillonaria y poderosa.
VOCES Y SILENCIOS EN EL PODER
Karl Lauterbach, ministro alemán de Sanidad, ha llegado a expresar su empatía por las personas que han experimentado los efectos adversos del fármaco. Sin embargo, según muchos alemanes, su percepción es difusa y contradictoria, en la que se mezclan diferentes conceptos y se diluye la gravedad del asunto. Su posición ha planteado la posibilidad de una manipulación consciente de la información disponible, dejando a la sociedad en un mar de dudas y temores.
En el otro lado del mismo lado del cuadrilátero se encuentra Emer Cooke, directora de la EMA, quien ha ocupado cargos en el pasado en la propia industria farmacéutica, y en determinados momentos ha estado, incluso, a la cabeza del proceso de aprobación acelerada de Comirnaty. Cooke, ha mantenido, de manera perseverante, una actitud favorable a las adaptaciones de la vacuna, a pesar de las crecientes evidencias de que existen clarísimos riesgos asociados.
UN ESCENARIO DE INCERTIDUMBRE Y RIESGOS
Lo cierto es que el propio informe de la EMA muestran que las características de la nueva versión de la vacuna indican una escala creciente de efectos secundarios, como la miocarditis y la pericarditis, principalmente en hombres jóvenes y después de la segunda dosis. La escala de riesgo de la vacuna indica que los eventos negativos han pasado de ser de «muy raros» a «un mayor riesgo».
Han habido casos en los que los pacientes han necesitado cuidados intensivos e, incluso, La evolución del evento ha llegado a concluir en resultados fatales.
Sin embargo, tales hallazgos y advertencias parecen estar cayendo en oídos sordos, Como si las autoridades sanitarias alemanas estuvieran «oyendo llover». La pregunta, no obstante, persiste:
¿Por qué un producto con tales evidencias de riesgo no es retirado del mercado definitiva e inmediatamente?
Ni la EMA, ni la Organización Mundial de la Salud ( OMS), ni las autoridades alemanas pertinentes, y menos aún la empresa productora, BioNTech, han sido capaces de trasladar con claridad esta información al público, pero, sin embargo, las recomendaciones para nuevas dosis de vacuna continúan en pie.
Las inquietantes anomalías, los efectos secundarios alarmantes y la información opaca contenida en documentos densos e ilegibles para los no expertos, plantean un panorama médico y social crítico. En medio de esta tempestad de datos y silencios, la sociedad, las vidas humanas, parecen estar en un delicado equilibrio, donde el término «escándalo farmacéutico» podría no alcanzar para describir la magnitud real del asunto.
La pregunta subsiste: ¿Hasta cuándo se ignorará el costo humano en pos de los intereses económicos y políticos?
https://canarias-semanal.org/art/34999/es-la-nueva-vacuna-arnm-anticovid-una-innovacion-medica-o-un-riesgo-letal