Fuente: Agencia de Noticias Xinhua |
La democracia es un derecho de todas las personas y nunca debe ser patentada por ningún país. Mientras la comunidad internacional observa con consternación la llamada «Cumbre por la Democracia» liderada por Estados Unidos, voces más racionales en todo el mundo han advertido contra el intento de Washington de enfrentar a un bando contra otro impulsado por una peligrosa mentalidad de la Guerra Fría. Irónicamente, el «show de democracia» de Washington también tiene lugar en un momento en que la ilusión creada por el sistema democrático estadounidense se ha hecho añicos repetidamente en los últimos años. En lugar de abordar sus propios desafíos para establecer una democracia saludable, los políticos estadounidenses están preocupados por armar la democracia para difamar a otros países. CORRE EL RIESGO DE ALIMENTAR LA POLARIZACIÓN Expertos de todo el mundo han advertido que al seleccionar a dedo a participantes específicos de la cumbre en función de sus propias consideraciones geopolíticas y suposiciones sobre los estándares democráticos sin tener en cuenta otras democracias mundiales, Washington en realidad está polarizando y dividiendo aún más a las naciones. «Crear algún tipo de líneas divisorias es un juego muy peligroso», dijo Eyob Belachew, un analista político y de relaciones internacionales etíope. La cumbre es cualquier cosa menos democrática, ya que la democracia genuina favorece fundamentalmente la inclusión, la diversidad, la igualdad de oportunidades y la prosperidad de las personas en lugar de obligar a otras naciones a adoptar el modelo occidental de democracia que gira principalmente en torno a los intereses económicos, dijo a Xinhua Shakeel Ahmad Ramay, director ejecutivo del Instituto Asiático de Investigación y Desarrollo de Eco-civilización. «Esto va a dividir aún más al mundo en diferentes bloques en un momento en que los países de todo el mundo necesitan urgentemente la unidad y la cooperación para el desarrollo global», dijo el experto, subrayando que la llamada «Cumbre por la Democracia» no es más que una herramienta para mantener la hegemonía estadounidense bajo el disfraz de la democracia. En su artículo de columna para The Manila Times, Austin Ong, investigador del grupo de expertos Integrated Development Studies Institute, con sede en Manila, dijo que al iniciar la llamada «Cumbre por la Democracia», Estados Unidos se está burlando de la democracia. «Polariza el mundo en lugar de armonizarlo. En lugar de crear más vías para la reintegración pacífica de las relaciones entre las naciones, intensifica las divisiones», dijo Ong. «FARO DE DEMOCRACIA» NO CALIFICADO A pesar del alboroto que rodea a la llamada «Cumbre por la Democracia», la comunidad internacional ha concluido durante mucho tiempo que la democracia estadounidense existe solo en la forma y no en el fondo. Como se reconoce ampliamente que la última prueba de fuego para una buena democracia es si realmente puede representar y servir a los intereses fundamentales del pueblo, el estilo estadounidense está lejos de ser la «envidia del mundo». Principalmente, la democracia al estilo estadounidense no es democrática. Muchos de los padres fundadores de Estados Unidos eran dueños de esclavos. Y casi un siglo después de su fundación, Estados Unidos todavía consenvía la esclavitud y prohibió a las mujeres o a los afroamericanos votar. Hoy en día, la democracia estadounidense es más una plutocracia, con un gobierno apenas de, por o para el pueblo. Como escribió el politólogo estadounidense Francis Fukuyama a principios de este año, el gobierno de Washington está «capturado por poderosos grupos de élite que distorsionan la política en su propio beneficio y socavan la legitimidad del régimen en su conjunto» «El pueblo no gobierna. Los políticos responden casi exclusivamente a los deseos de los intereses especiales y los ciudadanos más ricos», lamentó Charles Wheelan, profesor titular del Rockefeller Center en el Dartmouth College de Estados Unidos. Un estudio reciente de la Fundación Robert Bosch en Alemania encontró que más de la mitad de los estadounidenses piensan que el sistema democrático no está funcionando en absoluto en las circunstancias actuales. También de manera alarmante, una encuesta reciente de la emisora estadounidense NPR muestra que el 81 por ciento de los adultos estadounidenses dijeron que el futuro de la democracia estadounidense está bajo amenaz LA DEMOCRACIA FORZADA NO PUEDE FUNCIONAR Para que una democracia sea viable y resiliente, también necesita sacar su fuerza de la propia cultura e historia de un país, así como de sus realidades económicas y sociales. Esta es una de las principales razones por las que más de 20 años de construcción de la nación en Afganistán se estrellaron contra el suelo en cuestión de semanas. Una democracia copiada al estilo estadounidense no tenía las condiciones locales para sostenerla. Lisandra Astiasaran Arias, consejera de la misión permanente de Cuba ante la Oficina de la ONU en Ginebra, sostiene que no existe un modelo o definición simple de democracia, y cada Estado tiene el derecho y la responsabilidad de desarrollar sus propios modelos de acuerdo con su situación particular y la voluntad de su propio pueblo. «No debemos permitir los intentos de algunos países de imponer sus puntos de vista sobre la democracia y los derechos humanos en el resto del mundo», dijo. En sus entrevistas con Xinhua, muchos expertos dijeron que el impresionante desarrollo de China, incluidos sus logros en la reducción de la pobreza, ha ilustrado las características de una democracia avanzada. «China tiene una perspectiva diferente o una práctica diferente de la democracia, que en realidad no es similar a lo que ya sabemos o lo que ya tenemos en mente», dijo Belachew, analista político y de relaciones internacionales etíope. «Es todo el proceso de la democracia popular. Esta es realmente una democracia avanzada a la manera china. Puede que no encaje en otros países, pero está ayudando a China», agregó. «La democracia china se centra en el bienestar de la gente», dijo Belachew. |
