Los «cazarrecompensas» recibirán 10.000 dólares por cada denuncia de aborto que formulen ante los tribunales .
La prensa estadounidense ha dado conocer este lunes el contenido de la denominada «ley del latido» por la cual el Estado estadounidense de Texas, contraviniendo un dictamen del Tribunal Supremo de los EEUU, prohíbe el aborto después de que se pueda detectar el «latido del embrión» después de la sexta semana del embarazo. Asimismo, se ha creado la figura legal que recupera al «cazarrecompensas» del Oeste americano, cuya función será la de denunciar ante los tribunales a las abortistas, a sus inductores o defensores, a cambio de una recompensa de 10.000 $
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Según informó este lunes el periódico estadounidense «The New York Times», desde el pasado miércoles ha entrado en vigor en el Estado norteamericano de Texas una nueva ley por la que se prohíbe la mayoría de los abortos después de que hayan transcurrido seis semanas de gestación. Ello se produce a pesar del dictamen del Tribunal Supremo estadounidense, que en 1973 estableció el derecho constitucional a la práctica del aborto, lo que ha convertido al Estado de Texas en el más restrictivo del país en cuanto al acceso a los servicios de interrupción del embarazo se refiere.
Aunque otros Estados de los EE.UU. han llegado a aprobar leyes bastante similares, todas las tentativas precedentes han tropezado con el muro infranqueable de las impugnaciones legales. Pero en el caso de la ley anti abortista de Texas es la primera vez que un intento de estas características ha tenido éxito y ha comenzado a aplicarse.
La ley en cuestión prohíbe los abortos una vez que se pueda «detectar actividad cardiaca en el embrión materno». Esto suele suceder alrededor de la sexta semana de embarazo. Incluso el «latido del embrión» puede producirse sin que muchas mujeres hayan llegado a apercibirse de que se encuentran embarazadas.
“Es muy posible y bastante común -explicó Jennifer Villavicencio, principal responsable de la transformación de la equidad en el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos – que las mujeres lleguen a las seis semanas y no sepan que están embarazadas”.
En Texas hay una población de alrededor de 7 millones de mujeres en edad fértil, y esta ley va a afectar de lleno a la posibilidad de que este sector de la población no pueda acceder al aborto. Pero sucede, además, que esta ley restrictiva aprobada ahora por el ultraconservador Estado de Texas afectará a sectores de la población especialmente vulnerables, como son las adolescentes, que frecuentemente ni siquiera llegan a detectar que se encuentran embarazadas hasta que la gestación está ya muy avanzada. Asimismo, afectará a la población con bajos ingresos, que necesita reunir en torno a los 550 dólares para poder cubrir los gastos médicos necesarios para la práctica del aborto.
INSÓLITO: SE CREA LA FIGURA LEGAL DEL «CAZARRECOMPENSAS ANTIABORTISTA»
Pero lo que realmente provoca escalofríos, según informaba este lunes el digital estadounidense «Truthout», es que la nueva ley antiabortista del Estado de Texas, no sólo faculta a cualquier ciudadano a formular una demanda en contra de una mujer que haya decidido abortar, sino que otorga a cualquier persona ajena a ella la capacidad legal para denunciar a aquellos/as que estime que directa, indirecta o inductivamente han «participado» en la práctica abortiva.
Aunque la envergadura de este abracadabrante evento legal pueda resultar inverosímil en pleno siglo XXI, la realidad es que con la nueva legislación promulgada el Estado de Texas recupera, además, la figura del «cazarrecompensas«, del viejo y salvaje Oeste americano. Y es que la nueva ley garantiza que cualquier persona que presente una denuncia en contra de un aborto podrá recibir una recompensa de 10.000 dólares por cada aborto denunciado, a lo que en determinados casos se añadirán los costos y honorarios de los abogados que han gestionado la denuncia presentada.
Por si fuera poco, la nueva legislación antiabortista del Estado de Texas tiene en cuenta la posibilidad de que en determinadas circunstancias sea el propio Estado de Texas el que sufrague los gastos del demandante, en caso de que éste pierda en el litigio legal emprendido contra los presuntos «cómplices» de un aborto. A ello se añade, además, el hecho de que los «cazarrecompensas» pueden presentar demandas hasta seis años después de que se haya producido la supuesta «complicidad» del demandado.
Según el digital norteamericano «Truthout», el Estado de Texas ha creado en realidad una auténtica «bomba de relojería» para cualquiera que se atreva a expresar todo tipo de argumentos que defiendan o discutan públicamente sobre el aborto a través de foros y chats internáuticos. Sobre eso ya sabemos mucho en el Estado español.