«¿Hasta cuándo vamos a consentir que esta farsa de democracia se siga imponiendo?»
Lo que está pasando en las calles – escribe Tomás F. Ruiz – se llama solidaridad con Pablo Hasel y todas estas movilizaciones tienen como objetivo apoyar y no dejar solas a las víctimas encarceladas injustamente en este país; un país donde se violan sistemática e impunemente los derechos humanos (…).
Por TOMÁS F. RUIZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
Lo que está pasando en las calles se llama solidaridad con Pablo Hasel y todas estas movilizaciones tienen como objetivo apoyar y no dejar solas a las víctimas encarceladas injustamente en este país; un país donde se violan sistemática e impunemente los derechos humanos y donde la justicia y el gobierno amparan a los cuerpos represivos en todo tipo de brutales agresiones que cometan. La última de estas agresiones ha consistido en reventarle el ojo a una manifestante que gritaba «libertad para Pablo Hasel».
Cuando los manifestantes no violentos y pacíficos son apaleados, detenidos y torturados en las comisarías por la policía, nadie protesta, todo está bien. Cuando esos mismos manifestantes se hartan de ser apaleados, detenidos y torturados y se organizan para contestar a la violencia policial, toda la clase política se apresura a rasgarse las vestiduras y a denunciar esa la violencia, llamando a los manifestantes incivilizados, violentos y hasta terroristas… ¿Hasta cuándo vamos a consentir que esta farsa de democracia se siga imponiendo en España? La violencia del Estado con violencia se contesta.
Otro preso político
La detención de Pablo Hasél en Lleida nos ha hecho retroceder medio siglo atrás, a los tiempos en los que la Gestapo del régimen de Franco detenía a los disidentes de la dictadura que se refugiaban en iglesias, panteones o embajadas. Dejándose finalmente detener (en vez de huir de España) Pablo Hasél ha logrado su propósito: demostrar a Europa y al mundo entero que este país, el gigante con pies de barro que es hoy el Estado español, sigue siendo una dictadura encubierta donde todos los días se violan derechos humanos. Ahora, la despreciable justicia española se enorgullece de sumar a Pablo Hasél a la lista de presos políticos que mantiene encarcelados. Los magistrados de la Audiencia Nacional (precedidos por los del Tribunal Supremo), sin reparar en la breve vida que le queda a su despreciable montaje judicial, siempre están dispuestos a servir de cómplices para un Estado criminal.
Hay que reconocer el coraje demostrado en todo momento por Pablo Hasél, que ha mantenido imperturbable su rebeldía ante una justicia prostituida y ante un Estado monárquico en descomposición. Como ya ha pasado a tantos otros disidentes políticos (acusado de enaltecer terrorismo por la justicia española), Pablo Hasél se enfrenta ahora a un periodo de encarcelamiento durante el cual policías, guardias civiles, funcionarios de prisiones e incluso mozos de esquadra podrán torturar al detenido con absoluta impunidad. Cuentan para ello con la complicidad de una justicia que ya se ha revelado como cómplice abyecta de todo tipo de torturas, ramera mayor del «democrático» Estado español.
Es el momento de recordar y reafirmar todas las manifestaciones por la que Pablo ha sido juzgado y repetirlas hasta la saciedad por internet. Esta es la dirección de internet para dirigirse a los magistrados que han condenado en última instancia a Pablo Hasél: audiencianacional.salapenal.s3@justicia.es
Y estos son los nombres de los Excmos. y Corruptísimos magistrados del Tribunal Supremo que condenaron a la cárcel a Pablo Hasel: Joaquín Giménez García, Francisco Monterde Ferrer, Luciano Varela Castro, Antonio del Moral García y Carlos Granados Pérez.
¿Se atreverán a encarcelar también a todo el que les escriba emails ratificándose en las manifestaciones que han llevado a la cárcel a Pablo Hasél? Me temo que no habrá cárceles en España para encerrar a todos los indignados por su criminal actuación.
Tuits por los que Pablo Hasél ha sido condenado:
«Policías que con Franco encarcelaban y que ahora encarcelan como jueces de la Audiencia Nazi-onal»
«¿50 policías heridos? Estos mercenarios de mierda se muerden la lengua pegando hostias y dicen que están heridos»
«Policía Nazi-onal torturando hasta delante de las cámaras»
«El mafioso de mierda del rey dando lecciones desde un palacio, millonario a costa de la miseria ajena»
«Llaman banda criminal a grafiteros y no a la monarquía. Menudo estado demencial»
«La monarquía (española) pasará a la historia como los parásitos que son»
«¡Muerte al Estado fascista!»
