Rui Facó, en 1963, publicó un libro de inagotable interés por la comprensión de la historia de Brasil, titulado “Cangaceiros e fanáticos: génesis y luchas”, en el que analiza los fenómenos del cangaço y el mesianismo como parte integral de la revuelta contra los semi -orden feudal brasileño. Desde que Euclides da Cunha consideraba a los rebeldes como “rezagados” de la civilización hasta nuestros días, parece que en la ciencia oficial y en la ideología dominante no se han desarrollado nuevas formas de comprensión y explicación del descontento popular por la violación de los derechos del pueblo. por la crisis imperialista, lo cual se explica bien si entendemos la ciencia y la ideología imperialistas como los cadáveres que son.
Las opiniones pseudocientíficas y pseudomoderadas que repiten y actualizan estas formas de condena a la lucha popular presentadas en la academia y en la prensa monopolista sobre el actual conflicto en Palestina, las mismas emitidas sobre Irán, Irak, Líbano, Yemen y muchos otros Otros países del mundo, especialmente en Medio Oriente, en diferentes momentos de la historia reciente, reflejan el papel de la llamada intelectualidad del “mundo civilizado”: prostituyéndose para garantizar la repercusión de las mentiras que legitiman el imperialismo y su violencia. contra el pueblo. Con el afán de manipular la opinión popular y justificar la evidente y clara violación de los derechos de los pueblos y naciones, estos cobardes invocan un supuesto “fundamentalismo” islámico que rige las organizaciones de la Resistencia Nacional Palestina y un supuesto “terrorismo”, y repiten cómo Repetimos, en versión suavizada, a veces, el error garrafal del genocida Netanyahu, que bramó en una lucha contra el “eje del mal”.
Todavía nos resulta entrañable la pregunta que plantea Facó al iniciar la exposición de la génesis del cangaço en Brasil: “En un ambiente donde todo le es adverso, ¿podría el campesino permanecer inerte, pasivo, cruzarse de brazos ante un orden de cosas que se derrumba sobre él? 1 . Este sería el deseo del imperialismo y sus títeres, los que están detrás de la sumisión del destino de los pueblos a las necesidades e intereses del capital financiero sublimados en las instituciones financieras internacionales, como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), y en las instituciones intergubernamentales. organizaciones como las Naciones Unidas (ONU). La experiencia concreta de los pueblos, sin embargo, y la ciencia que no se somete a las necesidades de las clases dominantes, nos permiten comprobar que el imperialismo es violencia y reaccionarismo en todas sus líneas y, para que no caigamos en los cantos de sirena de La reacción y la violencia que pretende ser moralizante/democrática, nos da la capacidad de aplicar, en primer lugar, el entendimiento de que rebelarse es justo.
De la disputada a Palestina
En Canudos, Contestado, en Caldeirão, como en tantas otras revueltas campesinas mesiánicas de finales del siglo XIX y primera mitad del XX, los campesinos pobres, algunos previamente condenados a la mendicidad por la economía terrateniente, otros habiéndose incorporado los movimientos revueltos porque vivían bajo el yugo de la violencia y la miseria impuesto en el campo, fueron atacados por el viejo Estado brasileño con sabotajes, tiroteos, bombardeos de aviones de guerra, sufrieron verdaderas masacres, pura y simplemente por reclamar el derecho a la tierra. . Las cabezas de Virgulino Ferreira da Silva, del conocido bandido Lampião, de María Bonita y de muchos otros de la pandilla, fueron exhibidas en procesión por ciudades del Nordeste, hasta llegar a Salvador, después del Enfrentamiento de Angicos de 1938.
También fue en 1938 cuando los restos de Caldeirão y otros que se les habían unido, organizados en Pau de Colher, fueron asesinados en nuevos ataques sangrientos por parte del viejo Estado, que no perdonó a niños, mujeres ni ancianos. Seis años antes, la dictadura de Vargas construyó siete campos de concentración, durante el período de la Gran Sequía, en Ceará, para campesinos pobres, que morían en masa. Siete años después surgieron las Ligas Campesinas lideradas por el Partido Comunista de Brasil. Cangaceiros y “fanáticos”, nacidos del mismo contexto histórico y social, desaparecieron al mismo tiempo. Sin embargo, ni los motivos de la revuelta ni la revuelta desaparecieron con ellos, que fueron acusados tanto de fanatismo como de bandidaje y, en el caso de los campesinos de Caldeirão y Pau de Colher, de apoyar a los comunistas. La revuelta del campesinado se desarrolló y organizó y haría temblar tanto al viejo Estado que, bajo los auspicios del imperialismo yanqui, impuso la dictadura fascista de 1964 contra todo el pueblo.
Hoy, en Brasil, continúa a todo vapor la criminalización e imputación de epítetos como “terrorista” y otros que buscan criminalizar la lucha popular por parte del viejo Estado y la prensa monopólica, tácita o abiertamente apoyada por el oportunismo. Vemos en el campo y en la ciudad los múltiples intentos de justificar o legitimar masacres, asesinatos, detenciones, todo tipo de violaciones a la lucha política de las masas, a través de ficciones legales y mediáticas. Periodistas reaccionarios como Reinaldo de Azevedo y monopolios de prensa como la Revista IstoÉ llaman descaradamente terroristas a las organizaciones campesinas que luchan por la tierra, como la Liga de Campesinos Pobres; En 2019, el ex jefe de turno del viejo Estado y ultrareaccionario Jair Bolsonaro bramó contra los campesinos de Rondônia y envió allí la Fuerza Nacional en un intento, junto con el sanguinario gobernador Marcos Rocha, de cometer una masacre, bloqueada por el gigantesco fuerza del campesinado combativo, que contó con el amplio apoyo de las masas democráticas brasileñas y de los demócratas de todo el mundo; La oportunista Dilma Rousseff, sin diferir mucho, calificó de terroristas a los manifestantes combativos en 2013, creando en 2016 la llamada “Ley Antiterrorista”, en el momento de las protestas contra los Juegos Olímpicos, para frenar las manifestaciones políticas garantizadas constitucionalmente –en el Al mismo tiempo, el viejo Estado beneficia a sus carniceros, como Cysneiros Pachá, autor intelectual del acto terrorista contra el campesinado pobre en 1995, en la Heroica Resistencia Campesina Armada de Corumbiara, por la que Brasil fue condenado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. (CIDH) por violar el derecho a la vida, dándoles cargos políticos 2 . Las fuerzas de represión oficiales y no oficiales no se someten a las legalidades nominales de la ONU ni del propio viejo Estado brasileño, ya que lo que garantiza el poder de los reaccionarios es la represión del pueblo. La democracia y la ley, para las amplias masas y para quienes no están de acuerdo con el orden actual, sólo resultan en dictadura y violación de derechos.
O dito “reconhecimento jurídico” da dignidade universal do homem não logrou senão a universalização da possibilidade da sanção estatal, sangrenta ou não, contra aqueles que combatem, em nome da libertação de todo o povo, a ordem que foi parteira das maiores atrocidades cometidas contra la humanidad. La farsa de “defensa del mundo libre”, de la “democracia”, en el mundo dividido entre el imperialismo y los países oprimidos, no significa más que el reconocimiento intraimperialista del derecho a la invasión, a la violación de los pueblos y su soberanía, a la agresión, injerencias económicas, políticas y militares, un acuerdo firmado por las potencias en organizaciones como la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el FMI y la propia ONU –que no excluye y de hecho reafirma su opuesto, la disputa interimperialista por la mayor parte del botín, la tendencia a la monopolización, es decir, la lucha por la supervivencia parasitaria del cuerpo ya descompuesto del capitalismo, siendo la tendencia principal y la unidad entre poderes sólo una relación frágil e inestable entre carniceros. La “santa alianza” de los reaccionarios se realiza también con las relaciones que se establecen entre el imperialismo y las clases reaccionarias de los países oprimidos, específicamente los terratenientes y la burguesía compradora y burocrática.
En ningún lugar del mundo, en la actualidad, hay mayor desvergüenza en el uso de las ficciones ideológicas de la “defensa del mundo libre” y la “democracia” que en la condena de la justa lucha del pueblo palestino, enmascarado y muy mal enmascarada, como condena a la organización política y militar Hamás, la organización que lidera la heroica e intrépida Resistencia Nacional Palestina en la lucha de liberación nacional contra el sionismo y el imperialismo yanqui, cuyo puesto de avanzada en Medio Oriente se encuentra en el territorio palestino ocupado hoy llamado Israel. La reinvención del crimen de bandidaje y fanatismo como terrorismo y fundamentalismo, en el contexto de la farsa de la “guerra contra el terrorismo”, se utiliza hoy para justificar el genocidio de 20.000 palestinos en Gaza, la aplicación de medidas nunca antes vistas para promover las matanzas por hambre y sed, la destrucción de hospitales y de todos los refugios que arrojaron a las calles a la muerte a 50.000 heridos 3 , los ataques contra las ambulancias, incluso las de la Cruz Roja, y contra los profesionales sanitarios, muertos y heridos en el intentar llevar a cabo su labor, no menos heroica, de atender a los heridos.
La guerra de Israel contra el pueblo palestino, que ha durado casi ocho décadas y ahora Se agudiza, sin embargo, los medios oficiales, monopólicos y reaccionarios insisten en decir que lo que allí se combate es terrorismo, reproducen fielmente todas las mentiras bélicas sionistas y exaltan los “valores democráticos” del “mundo libre”, tales como como paz, proponiendo hipócritamente una falsa “solución de dos Estados”, que, como señaló un texto reciente de la Asociación Brasileña de Abogados del Pueblo – Gabriel Pimenta (ABRAPO) , ya implica el reconocimiento de la legitimidad de la violación de los derechos de los palestinos. pueblo por la entidad sionista.
Los “intelectuales” y los “expertos” vendidos al imperialismo y los hipócritas, igualmente, legitiman las medidas del “mundo libre” que van en contra de los pueblos de todo Medio Oriente al condenar las luchas populares desarrolladas en naciones predominantemente islámicas por su “fundamentalismo”. e incluso la violación de valores culturales, como el uso de la abaya, en Francia, pasa por moderación y ejercicio del laicismo. En este contexto, los reaccionarios declarados y los conocidos “guerreros de la justicia social”, igualmente comprometidos a considerar la “civilización” yanqui y europea, ya sea en su falsa democratización o en su verdadera violación imperialista de todos los pueblos oprimidos del mundo y de los derechos de las minorías sociales, como modelo político que deben buscar los “rezagados” o que se les debe imponer. Justifican, como sea, la condena a una lucha justa, liderada por el propio pueblo y las organizaciones reconocidas por él, que, al final, resulta en la justificación de la acción criminal que busca mantener encadenados a esos mismos pueblos. . Se dice que las mujeres están oprimidas, mientras Israel asesina a esas mismas mujeres y a los niños en sus vientres con bombas; se dice que las organizaciones son extremistas religiosas, mientras que Israel es un estado de apartheid fundado en la concepción errónea de una etnia judía, que utiliza preceptos religiosos para guiar todos sus derechos civiles y su “derecho divino” al territorio ocupado; Se dice que las organizaciones y quienes las defienden son antisemitas, mientras que Israel también se basa en la exclusión de todos los demás pueblos semíticos que vivían en el territorio legítimamente ocupado.
Rui Facó dice sobre el Contestado: “Como los fanáticos habían reaccionado ante la agresión, ya no hacía falta el primer pretexto: el fanatismo. Esto sólo había servido como justificación para abrir la pelea. La reacción armada no pudo ser de simples fanáticos: ¡fue de bandidos!”. 4 . Desde la Disputada hasta Palestina, los aspectos culturales y la resistencia al viejo Estado agresor son, por la ideología dominante y las fuerzas de represión, utilizados para mistificar la lucha popular y, en consecuencia, legitimar la agresión contra el pueblo. El intento de separar a Hamás del pueblo, en el actual conflicto, suscita también la hipocresía de las acusaciones de fanatismo y terrorismo, ya que, el apoyo del pueblo palestino a Hamás y a las organizaciones de Resistencia Nacional ha quedado demostrado y sigue demostrándose día a día. Palestina y el rechazo de los arribistas subordinados a Israel y al imperialismo de la Autoridad Palestina, quienes, a cambio, se vuelven contra los palestinos y actúan como policía política donde tienen poder.
El 9 de diciembre, un emotivo audio demostró este apoyo: mientras los combatientes de la Resistencia Nacional Palestina tendían una emboscada a los soldados sionistas en el norte de Gaza, la gente a su alrededor gritaba: “Alá es grande”. Lejos de demostrar fanatismo, la manifestación de carácter religioso demuestra lo que también aprendieron los campesinos en la lucha mesiánica, en muchas partes, y los pueblos del mundo en las diversas luchas de liberación nacional: que la guerra reaccionaria contra el pueblo sólo puede ser respondido con una lucha constante, por los medios necesarios. Otra manifestación popular, el 10 de diciembre, demuestra la alegría y la esperanza del pueblo ante las derrotas del sionismo:
Las Fuerzas de Ocupación Israelíes fueron destruidas en el campo. Cayeron de rodillas. Fueron destruidos aquí mismo, en el barrio de Al-Qasasib.
¡Quemaron los tanques!
Todavía estamos en el campamento. ¡No nos iremos! Se irán. Estamos firmes y firmes.
Juro que la resistencia los destruyó. Juro que sus partes del cuerpo están volando. 5
La fe, manifestándose de acuerdo con las concepciones culturales vigentes, adquiere en este contexto un carácter inminentemente popular y se convierte también en fe en las capacidades del pueblo para alcanzar los objetivos de liberación que busca, es decir, se convierte en fe en la lucha y, en la situación actual. conflicto, lucha armada, por lo que es considerada repugnante por reaccionarios y pseudomoderados.
La desesperación del sionismo/imperialismo y el carácter científico de la lucha en Palestina
Facó afirma que luego de la primera incursión contra las fuerzas de la reacción en la localidad de Uauá, en Bahía, donde dormían más de un centenar de hombres de la tropa comandada por el teniente Pires Ferreira, dispuestos a atacar Canudos, el importante pero costoso éxito se reflejó en el aprendizaje. para los campesinos y se modificaron las tácticas utilizadas en los siguientes enfrentamientos:
A partir de entonces, salvo en posiciones muy sólidas -en los puertos de montaña o en las trincheras del interior de Canudos-, su táctica preferida sería atacar al enemigo en pequeños grupos, cuyo número variaba según las condiciones del terreno y la importancia de la zona. misión a cumplir…. Y luego realizaban la implicación del adversario, el ataque por el flanco o por la retaguardia, las emboscadas en la delgada maleza —la caatinga— aprovechando al máximo el factor sorpresa y aprovechando todas las ventajas que ofrecían las características del terreno. Porque en el Nordeste de Brasil “las caatingas son un aliado incorruptible del pueblo del campo en rebelión. Ellos también se unen a la lucha. Se arman para el combate; ellos atacan. Son impenetrables para los forasteros, pero se abren a senderos de varios carriles para los nativos que nacieron y crecieron allí”. 6
Recientemente, un importante editorial del periódico AND destacó el siguiente entendimiento sobre la lucha de la Resistencia Nacional Palestina:
La trascendencia histórica de la lucha del pueblo palestino reside no sólo en su extraordinario heroísmo, en su indescriptible voluntad de sacrificarse y de no considerar nunca la rendición. Aunque esto en sí mismo valdría el puesto más alto en el salón de los mayores logros de la humanidad, la guerra palestina de resistencia nacional es trascendental porque demuestra que la línea militar del proletariado es universal. Si el pueblo palestino puede mantener una especie de base de apoyo en un territorio tan pequeño y prácticamente urbano, con una topografía desfavorable para la guerra de guerrillas tradicional, bajo un asedio total ejercido por las fuerzas armadas “más efectivas” del mundo y reconocidas mundialmente por su ¿Su pericia? en espionaje e “inteligencia”, entonces la lucha revolucionaria contra el imperialismo y sus lacayos es posible en cualquier parte del mundo, siempre y cuando las masas estén movilizadas y, apoyándose en ellas, desencadenen una guerra popular prolongada, manteniendo siempre la iniciativa 7 .
La lucha enseña y las lecciones que imparte, históricamente y en procesos concretos, son científicas. Esta es precisamente la razón por la que los sionistas se desesperan, por la que surgen divisiones entre el imperialismo yanqui y el genocida Netanyahu, por la que los periódicos sionistas y los monopolios de la prensa yanqui son incapaces, a pesar de toda la mistificación, de ocultar la inminencia de la derrota militar y la política de los enemigos del pueblo, la incapacidad de Israel. para derrotar a Hamás. Los combatientes de la Resistencia Nacional Palestina y la dirección política de Hamás no expresan fanatismo religioso, sino más bien una comprensión de la lucha armada y la lucha política, en el campo de batalla y en el ámbito del derecho internacional y los acuerdos de guerra – como también destaca el editorial: La lucha armada en Palestina aún no ha encontrado la hegemonía proletaria, pero asimila en la guerra las leyes objetivas que rigen un conflicto prolongado.
Gaza se ha convertido en un cementerio para los soldados sionistas y aún con todo el apoyo yanqui, Israel apenas es capaz de atender a sus propios heridos y trata de ocultar lo más posible el número de muertos de su ejército de agresores. Todos los planes sionistas en el campo táctico han fracasado y lo único que les queda es la continuación del genocidio contra el pueblo, que es la forma en que los líderes de la ocupación, con toda su cobardía, encuentran venganza por la intrepidez y la valentía de los palestinos. Gaza demuestra hoy que se desarrolló de acuerdo con “las exigencias de una lucha a vida o muerte 8 ”. Sus profundos túneles brindan la posibilidad de ataques sorpresa, monitoreo de actividades sionistas y sirven como trampa para atacar a los soldados israelíes, de modo que los combatientes de la Resistencia puedan desaparecer de la vista de los enemigos del pueblo y resurgir en otro lugar, para proteger las vidas de los prisioneros. de guerra que luego utilizó Hamás para poner a Israel de rodillas, doblegándolo ante el deseo de liberación del pueblo palestino. Los soldados sionistas se sienten atraídos hacia el interior de la tierra palestina, donde son acosados, emboscados, sus vehículos destruidos, su moral, ya baja, anulada, y lo único que les queda son los gemidos de quienes ya se saben derrotados. Cada edificio en el que entren podría ser una trampa, de detrás de cada escombros podría surgir un combatiente de las Brigadas Al-Qassam, detrás de cada campamento podría haber un túnel, podrían haberse colocado explosivos en las calles de cada barrio. El ejército supuestamente “más eficaz” del mundo, de hecho, en el conflicto actual, no ha hecho más que demostrar que el imperialismo es un tigre de papel, que tiembla ante una fuerza más débil en varios aspectos, pero que, sin embargo, adquiere su fuerza a partir de la propia experiencia de lucha y de la experiencia histórica de las luchas populares en diferentes países.
Sí, la pelea enseña. Para algunos, aquellos que libran una guerra justa contra un agresor reaccionario, les enseña cómo ganar, y también les ha estado enseñando, una vez más, al imperialismo lo que es la derrota. También ha estado enseñando que la guerra está hecha principalmente de fuerza humana, no sólo de números, sino de colectividad y creencia colectiva en la justicia del objetivo a alcanzar, que sólo puede ser completo cuando es real; está demostrado que la guerra, por tanto, no se gana sólo con armas poderosas y ejércitos “eficaces”, que en realidad sólo lo son en la represión sádica. Como en Canudos, que resistió valientemente innumerables incursiones de los militares reaccionarios, los combatientes de la Resistencia Nacional Palestina no temen la superioridad sionista en armas y en números absolutos de soldados entrenados, ya que cuentan con la aplicación de una superioridad relativa en su terreno y con las masas.
Volvamos a Facó, que dice:
Los generales del gobierno estaban seguros, cuando comenzó la lucha, de que el simple estallido de la artillería conduciría a la fuga masiva de los insurgentes. Ocurrió exactamente lo contrario. Ante la imposibilidad de enfrentar con ventaja los cañones, como sí podían enfrentarse a la infantería, arrebatando las armas a los soldados, los canudenses, desde el inicio de la contienda, insistieron en destruir las piezas. Al no poder hacerlo con armas, intentaron conseguirlo mediante enfrentamientos cuerpo a cuerpo 9 .
La lucha popular, en general, comienza con los medios disponibles y aplica siempre todos los medios necesarios. Los cañones de antes son los aviones y los tanques de ahora, es la Cúpula de Hierro, los misiles guiados. Como sucedió aquí, allí, en esta tierra grande y valiente, el trueno de los bombardeos, que son la agonía de un cuerpo en putrefacción, no hacen más que aumentar la determinación en la tarea de destruir al enemigo del pueblo. Cualquier daño a los vehículos, cualquier cohete que atraviese el sistema de defensa, debilita a Israel mucho más que cualquier acción genocida sionista, humilla a los agresores y reafirma el orgullo de los palestinos, así como su fe en la Resistencia. Mientras tanto, Netanyahu, el mayor perdedor, es expulsado de su posición dentro de sus propias fronteras, se aísla políticamente, aísla a Israel en todo Oriente Medio y suscita en las masas democráticas del mundo un rechazo cada vez más profundo al sionismo y un apoyo cada vez mayor a la democracia palestina. causa. También revela el carácter reaccionario de todas las potencias imperialistas que apoyan al sionismo, de los gobernantes de los países oprimidos y subordinados a ellos y de las fuerzas de represión, que se vuelven contra los manifestantes y partidarios del pueblo atacado con virulencia, censuran a los periodistas y disparan. a los inmigrantes y descendientes de inmigrantes árabes.
El sionismo y el imperialismo, en la relación simbiótica en la que existen, pueden desesperarse, de hecho, a medida que la acumulación de derrotas, en el conflicto actual y en la historia, tiende a aumentar, y mucho, ya que no sólo los palestinos desarrollan científicamente el camino. de la victoria, a través de la experiencia de la lucha, sino que otros pueblos del mundo, aquellos que ya han decidido firmemente la lucha armada en apoyo de la causa palestina entre las Naciones Árabes y todos los que ven en la causa palestina un faro que renueva la fe científica. En la guerra justa contra la guerra injusta, todo el que ve, en el conflicto actual y en la represión desatada contra los defensores del pueblo, el verdadero carácter del imperialismo, está o pronto comenzará a desafiar decisivamente la opresión nacional y a todos aquellos que se benefician de ella. dentro de sus propios países.
No se puede esperar, por supuesto, que el imperialismo se doblegue sólo ante la justicia de la lucha que une históricamente a Canudos y Palestina y a todos los pueblos oprimidos del mundo en la historia y en la actualidad. De hecho, es de esperarse precisamente lo contrario, ya que será mejor para los opresores y explotadores llamar a todos en todas partes terroristas y asestar sus golpes desesperados contra tantos frentes como haya que rendirse a su esperada y final decadencia. Pero en este día también recordarán una promesa hecha por la primera dirección del proletariado internacional, en 1859:
No tenemos compasión y no os pedimos compasión. Cuando llegue nuestro turno, no pondremos excusas para el terror. Pero los verdaderos terroristas, los terroristas por la gracia de Dios y la ley, son en la práctica brutales, despectivos y mezquinos, en teoría cobardes, reservados y engañosos, y en ambos aspectos deshonrosos .
Ultimas palabras
Facó dice:
Canudos fue […] uno de los momentos culminantes de la lucha de liberación de los pobres del campo. Su indomable resistencia muestra el formidable potencial revolucionario que existe en el corazón de las poblaciones del país y la enorme importancia del movimiento campesino en Brasil, cuya población rural constituye, aún hoy, la mayor parte de las masas trabajadoras del país. de Canudos quedará en nuestra historia como patrimonio de las masas rurales y gloria del movimiento revolucionario por su liberación 11 .
La historia demuestra que, a pesar de todas las acusaciones e intentos de manipular la opinión pública, siempre destaca la justicia de la lucha popular. Todos aquellos que se oponen a ella, de manera declarada o mediante subterfugios pseudomoderados, caen junto a todo lo reaccionario frente al progreso iniciado por la práctica social en busca de la libertad. Todos aquellos que apoyan decididamente al pueblo también son parte de él y caminan con él hacia la victoria final. Los nombres de los verdugos son arrastrados por los vientos de la historia, que llevan los ecos, por otro lado, de las voces y batallas de los héroes indomables de la resistencia a la opresión reaccionaria.
Hoy en Palestina también se está escribiendo una epopeya cuyo carácter multitudinario no puede cuestionarse ni negarse sin recurrir a la mentira. Es una epopeya mucho más nerudiana, en la que el pueblo y la tierra se confunden y los héroes son todos descendientes de luchas populares históricas, en la que el misticismo implica la grandeza de lo real y lo divino es la voluntad de las masas, que es homérico. . Bella en su gloria, a pesar de sus contornos trágicos, inspira ojos vivos y, al mismo tiempo que arranca lágrimas, alimenta el fuego revolucionario y nos hace sentir más que nosotros mismos, más que individuos, y aspirar a una victoria que nos trasciende. . Nos apoyan también los versos del poeta chileno que cantó la libertad de América Latina al describir tan poderoso sentimiento:
Me diste hermandad por lo que no sé.
Me agregaste la fuerza de todos los que viven.
Me diste de nuevo mi patria como si naciera.
Me diste la libertad que una persona solitaria no tiene.
Me enseñaste a encender la bondad, como el fuego.
Me diste la justicia que el árbol necesita.
Me enseñaste a ver la unidad y la diferencia de los hombres.
Me mostraste cómo el dolor de un ser murió en la victoria de todos.
Me enseñaste a dormir en las duras camas de mis hermanos.
Me hiciste construir sobre la realidad como una roca.
Me hiciste adversario del mal y muro de los frenéticos.
Me hiciste ver la claridad del mundo y la posibilidad de la alegría.
Me hiciste indestructible porque no he terminado contigo 12 .
- FACÓ, R. Cangaceiros y fanáticos: génesis y luchas. Río de Janeiro: Civilización brasileña, 1976. p. 30 ↩︎
- Pachá fue secretario de Seguridad en el gobierno del reaccionario Marcos Rocha, en Rondônia, durante los intentos de masacre contra la Liga de Campesinos Pobres en los años 2019-2021. Fue destituido en 2022, según periódicos reaccionarios, por haberse mostrado incapaz de reducir la criminalidad en la capital. ↩︎
- ↩︎
- FACÓ, 1976, p. 50. ↩︎
- Vea el Plantão Palestina del periódico A Nova Democracia iniciado el 8 de diciembre, disponible en: <https://anovademocracia.com.br/plantao-palestina-10/>. ↩︎
- Facó, 1976, pág. 91-92. ↩︎
- Y EDITORIAL. Editorial semanal – La trascendencia histórica de la guerra de resistencia del pueblo palestino. La Nueva Democracia, 07 dic. 2023. Disponible en: <https://anovademocracia.com.br/editorial-semanal-a-transcendencia-historica-da-guerra-de-resistencia-do-povo-palestino/>. ↩︎
- FACÓ, 1976, pág. 93. ↩︎
- FACÓ, 1976, p. 101. ↩︎
- Karl Marx en el editorial final del diario A Nova Gazeta Renana. Véase MARX, K. Supresión del Neue Rheinische Zeitung . MIA, 1994. Disponible en: <https://www.marxists.org/archive/marx/works/1849/05/19c.htm#terror>. ↩︎
- FACÓ, 1976, p. 118. ↩︎
- NERUDA, P. XV Canción: Yo Soy. XXVII: A mi Partido. En: NERUDA, P. Canto general . Río de Janeiro: Bertrand Brasil, 2010. ↩︎
