A pesar de que la tasa de los niños en riesgo de pobreza infantil se encuentra en un 27’8% en España, la beca comedor solo alcanza al 11% de los niños matriculados, por lo que más de 1 millón de niños se quedarán sin beca. Además, al menos cinco comunidades autónomas han decidido aumentar el precio del comedor, lo que supone un aumento a las dificultades que muchas familias obreras tienen a la hora de pagar el comedor. Huelga decir que dejar a los niños en el comedor escolar se ha vuelto una necesidad para muchas familias proletarias, necesidad impuesta por imposibilidad de conciliar vida laboral y familiar (extensa jornada laboral, tener más de un empleo…).
Isabel, una madre soltera residente en Murcia, declaraba ante El Diario: “Estoy sola, y con 756 euros al mes tengo que afrontar los gastos del alquiler, la luz y el agua, que suelen rondar los 530 euros; lo que nos queda tenemos que administrarlo para comer y los pequeños gastos que vayan surgiendo” . Esta es la realidad de millones de familias proletarias. Relacionado con esta noticia, el recién creado gobierno de PP y Vox en Extremadura ha eliminado la gratuidad universal del comedor escolar.
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